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Rubén Darío Insúa: “La camisa no hace ganar partidos”
En Portoviejo le recuerdan todos los días su paso por Barcelona. Le apuesta a la Capira en hacer un buen torneo para lograr un cupo internacional.
Rubén Darío Insúa es una marca en el Ecuador, son 29 años desde que llegó como jugador a Barcelona. Aquí lo ganó todo. Ha sido campeón con el Ídolo, jugó la final de la Copa Libertadores de 1997, fue campeón con el Deportivo Quito y subió a Liga de Portoviejo a la serie A en el 2019.
Dialoga con EXTRA sobre su vida con La Capira de Manabí, los recuerdos del elenco canario y un tema con el que siempre se lo relaciona: la camisa marrón que usa por 23 años.
¿Cómo le va en Portoviejo?
En estos momentos trabajando mucho, esperando el 21 de agosto que nos toca jugar el arranque del torneo, con la ilusión de que este año sea muy bueno para Liga, como fue en el 2019.
¿Se han reforzado bien después de la cuarentena?
No tanto, cuando se paró el torneo estábamos armando el plantel. Lo que no pudimos hacer en enero y febrero lo realizamos ahora. Llegaron tres jugadores, Ferrai, Angulo y Almada, pero uno se fue.
¿Almada sonaba fuerte el año anterior en Argentina?
Es un jugador muy joven que tiene hambre de gloria. Es sacrificado, vino a prueba por 10 días, pero ha mostrado cosas buenas.
Del tipo de jugador que era Ud., talentoso y que sabía manejar la pelota, ahora no se ven... ¿los actuales son mecánicos?
Sigue habiendo, acá tengo a un talentoso como Michael Jackson Quiñónez que le pega muy bien a la pelota. Quizás hay menos cantidad, pero eso pasa a nivel mundial. El fútbol actual ha perdido de jugar con esa clase de elementos. Pero estoy seguro de que poco a poco se volverá a tener esos jugadores.
Por ejemplo, River Plate de Argentina y Flamengo juegan con ese tipo de jugadores talentosos.
Los famosos 8 o 10 llegaban a la cancha y jugaban con mínimas indicaciones del DT, ¿ahora hasta el entrenador les dice como deben pararse y arreglarse la camiseta?
Nooo... no es así. Los buenos jugadores siempre existirán. Lo que pasa es que el contexto colectivo en la actualidad debe ayudarlos a sobresalir, hoy se juega mucho en equipo y con vigor físico, ese tipo de futbolistas necesita de respaldo.
¿Lo físico se llevó la magia?
En alguna medida sí, hay menos tiempo para pensar y menos espacio para maniobrar, por eso el fútbol ha perdido vistosidad en la parte técnica. Pero eso está relacionado con una gran revolución en la parte física y táctica.
¿Pero se extraña a los buenos volantes de armado?
Hay menos cantidad desde hace 15 años, pero uno ve a los equipos que dirige Guardiola, Klopp... River, Flamengo, tienen jugadores con mucho fútbol y les va bien, eso es lo que se debe copiar.
¿A Rubén Insúa el tema Barcelona debe ser diario en Portoviejo, a pesar de que es el DT del equipo de esa ciudad?
Portoviejo es una ciudad futbolera, por supuesto que aquí son hinchas de Liga y de Barcelona y en cualquier momento del día me cruzo con ellos.
¿Y qué es lo primero que dicen los hinchas amarillos?
Empiezan a hablar de las buenas épocas y de los campeonatos que nos fueron bien, del tiempo de Isidro Romero, del capitán Javier Paulson. También mencionan a los buenos jugadores que tuvo el equipo como Jimmy Montanero, Nicolás Asencio, Luis Gómez, Carlos Morales y más.
De su etapa como jugador o entrenador ¿por cuál le preguntan más?
La hinchada se quedó con las dos etapas. Como futbolista se acuerdan del gol con El Nacional en Quito, del Clásico del diluvio o del golazo que hizo José Gavica ante Valdez cuando salimos campeones, tremenda vuelta olímpica.
Como entrenador recuerdan el partido que con 10 jugadores le dimos vuelta después de ir perdiendo 2-0.
¿Muchos recuerdos con Barcelona?
El cariño es grande, cuando voy a Guayaquil tengo problemas, porque se enteran amigos que he estado en la ciudad, no los puede visitar y se resienten. Me siento como si fuera mi casa. Esto es lo más lindo del fútbol.
¿Campeón y jugar una final de la Copa Libertadores no se le da a todos?
Eso siempre me dicen los hinchas y solo les contesto con un gracias.
¿Se ganó el cariño?
Son 29 años, es una vida. Llegué en enero de 1991, este país me abrió las puertas como jugador y luego como entrenador. La parte deportiva es importante, pero el lado humano es lo mejor, lo más trascendente, acá hice buenos amigos.
Hay un asunto que todos se preguntan: ¿desde cuándo la camiseta marrón? Se la vimos puesta logrando cosas importantes con Barcelona, San Lorenzo y Liga de Portoviejo.
He leído varias historias urbanas sobre esa camisa. Pero diré toda la verdad. Estaba en Guayaquil y me la compré en el año 1997 en el Riocentro de Samborondón. Recuerdo ese día, me gustó y es mi compañera de vida.
¿Cábala o qué mismo?
Me siento cómodo, me gusta. (risas)
¿En este momento dónde la tiene?
Ahora está colgada en mi habitación en Portoviejo, la usé el año pasado y nos fue bien. Llegamos a la serie A con Liga de Portoviejo. Espero también lucirla este año con La Capira.
Son 23 años, ha dado vueltas olímpicas y Copa Sudamericana, subió a la serie A con La Capira.
Es la primera vez que habló de este tema, pero la verdad es la siguiente: lo más importante es tener buenos jugadores y una gran institución, además el respaldo de una hinchada para que salgan las cosas bien. No tiene nada que ver la ropa que uno use. La camisa no te hace ganar partidos. Si no hubiese tenido los jugadores con Barcelona en 1997 no habría sido campeón ni llegaba a la final de la Copa Libertadores. Fueron jugadores con temperamento, que marcaron una historia.
Pero ha dado vueltas olímpicas y sabe lo que es la gloria deportiva.
La realidad es que me siento cómodo y me trae buenos recuerdos, esa es la verdad.
De trabajar en Buenos Aires, Guayaquil y ahora en Portoviejo, ¿cuáles con los cambios?
Estoy cómodo, la ciudad es muy futbolera, Liga de Portoviejo tiene un club atrapante, muy popular. Viven el fútbol día a día, es algo lindo lo que se vive y lo disfruto al máximo.
Cuando llegué el 8 de febrero del 2019, La Capira llevaba 10 años en la serie B y ahora estamos en la A, la hinchada está de feliz.
¿La Capira de Insúa a qué aspira?
Ahora tenemos que sentar las bases para que Liga de Portoviejo esté muchos años en serie A, pero buscando alcanzar un cupo para un torneo internacional, esa es la meta.
Una maratón de partidos se viene en LigaPro ¿están listos?
Todos los que queremos que al fútbol ecuatoriano le vaya bien debemos estar preparados para competir tres o cuatro días. Lo que diga LigaPro hay que hacerlo, acá estamos listos para competir.