Un punto apenas es lo que necesita Barcelona para acceder a los octavos de final de la Copa Libertadores, pero para ello deberá tratar de obtener un resultado positivo en un escenario donde nunca le ha ido bien: la Bombonera.

Esta noche (19:00), los amarillos visitarán a Boca Juniors en la quinta fecha del grupo C y el cuadro ecuatoriano tratará de olvidar las dos derrotas que ha cosechado ante los xeneizes en Buenos Aires. En las ediciones de esta Copa de 2003 y 2013 el Ídolo perdió 2-1 y 1-0, respectivamente.

Pese a que Barcelona no sabe lo que significa ganar en este mítico escenario, Ricardo Noir, exjugador de ambos elencos, habló con EXTRA e indicó que los amarillos podrían sacarle provecho a la ausencia de público.

“En condiciones normales, sin pandemia, el estadio de seguro iba a estar a ‘reventar’ y esa presión de la gente juega un papel importante a favor de Boca. Pero sin el público, las cosas se ponen más parejas, ya no existe esa tensión y eso debe aprovecharlo Barcelona para sacar un resultado positivo”, dijo Noir.

El Pájaro, como conocen al delantero gaucho, expresó que siempre está al tanto de lo que sucede con sus dos anteriores equipos, por lo que considera que este será un cotejo de ida y vuelta.

“Siempre los sigo, sobre todo cuando son por partidos internacionales. Vi el partido que se dio en Guayaquil (ganó el Ídolo 1-0). Me gustó el segundo tiempo que hizo Barcelona, pero ahora creo que será un duelo más dinámico, porque Boca está obligado a ganar”.

Noir afirmó que si el elenco canario quiere sacar un resultado positivo, deberá salir a presionar, para complicar la salida de Boca.

“Barcelona tiene que jugar igual que lo hizo ante Santos, que lo fue a buscar arriba. Boca es un equipo que sale jugando bien desde la defensa, así que si lo incomoda en su campo podría hacerle mucho daño”.

LE TIENE CARIÑO A BARCELONA

Pese a que Noir solamente estuvo una temporada en Barcelona (2010), el argentino indicó que le guarda “un cariño especial”, al cuadro canario, pues este le abrió las puertas internacionalmente.

“Barcelona me acogió en un momento complicado que estaba viviendo. Recién salía de una dura lesión (rotura de ligamentos cruzados de la rodilla izquierda) y necesitaba ganar ritmo. Lastimosamente estuve un año en el que el equipo no andaba bien. Además no fui muy preparado y no me pude quedar”.

El actual jugador del Atlético Palmaflor de Bolivia recordó además que durante su paso por el Ídolo hizo una gran amistad con Matías Oyola, Máximo Banguera, entre otros.

“Con el Pony tenemos una amistad que dura hasta ahora. Recuerdo que él y Máximo me dieron la mano allá las tantas veces que andaba sin un peso (dólar) en el bolsillo, pues ese año el club pasaba por momentos duros en la parte económica y había meses que no cobraba. Abría la nevera de mi departamento y no había nada (risas). Incluso ellos se ofrecían para llevarme a los entrenamientos y regresarme a la casa”.

Otra de las situaciones complicadas que le tocó vivir a Noir en Ecuador fue cuando el 30 de septiembre de 2010 se dio la crisis política en el país.

“Ese día no lo olvido jamás. Estábamos saliendo del entrenamiento y nos decían que teníamos que ir rápido a la casa, porque había protestas en las calles. Además el presidente de ese entonces de Barcelona, Eduardo Maruri, me llamó a decirme que no saliera de la casa porque el club no me había agilitado la visa de trabajo y que si estaba en la calle me podría pasar algo. Fue un susto grande”.

Aunque fueron algunas experiencias negativas las que le tocó vivir, Noir espera que hoy el Ídolo clasifique a los octavos de final.

“Ojalá que Barcelona y Boca puedan pasar. Son dos equipos a los que quiero mucho, así que espero que todo salga positivo para ambos”.