El mítico estadio Maracaná se ha convertido en sinónimo de éxito para Liga de Quito. En ese escenario de Río de Janeiro conquistó la Copa Libertadores (2008) y la Copa Sudamericana (2009) ante Fluminense y ahora apunta a sumar la Recopa Sudamericana, curiosamente ante el mismo rival brasileño.

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Los albos llegan con la ventaja obtenida en la capital, con la victoria por 1-0, pero tienen claro que salir en un plan defensivo, en la revancha del jueves 29 de febrero, les puede traer serios problemas.

El técnico Josep Alcácer señaló que “creo que afrontar un partido tan largo con solo mecanismos defensivos no nos va a acercar a lo que queremos, que es llevar la copa a casa. No jugamos con la ventaja de la ida, el objetivo es ganar”. Resaltó que espera que su equipo “sea valiente y protagonista con el balón”.

El estratega español enfatizó que “veo muy motivados y convencidos a los jugadores. Sabemos que va a ser difícil, tenemos un auténtico monstruo a nivel ofensivo, con un valor de plantilla más alto que el nuestro. ¡Pero que nadie tenga duda de que Liga de Quito va a ir con todo!”.

Este positivismo lo compartió Ezequiel Piovi, capitán de los azucenas, quien indicó que “el equipo va a dejar todo para conseguir la sexta estrella (internacional)” y también destacó la palabra valentía en la actitud que deben presentar en el Maracaná.

“Ellos saldrán a buscar el partido, nosotros debemos cubrir bien los espacios y lastimarlos cuando tengamos la oportunidad”, sentenció.

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