El desempeño de Willian Pacho en la victoria de la Tricolor por 3-1 sobre Jamaica fue el tema de conversación previo al entrenamiento del club Huracán de Quinindé, la mañana del jueves 27 de junio.

Lea también: Copa América 2024 | Tabla de posiciones por grupos, así va Ecuador

El equipo, donde se formó el zaguero, estuvo a la expectativa de la actuación de su ídolo y ejemplo a seguir. Antes de entrar en calor en la cancha del sector Valle Alto, el entrenador Luis Valencia dio una charla de unos 10 minutos para hablar del partido del miércoles 26, que siguió solo desde el segundo tiempo junto a Byron Cedeño, con quien guió al defensa en sus inicios.

La primera etapa se la perdieron ya que se encontraban dirigiendo la práctica de las categorías infantiles del club. Pese a que la selección jugaba, las trabajos no pararon. Por momentos miraban el celular para saber cómo iba el partido, sin descuidar la preparación de los pequeños que todos los días se esfuerzan sobre el mismo campo de juego que hace nueve años pisó Pacho, quien tuvo un destacado desempeño ante los jamaiquinos.

El entrenamiento terminó pasadas las 17:00, cuando iban aproximadamente unos 20 minutos de juego de la Tri. Después de esperar a que los padres vayan a retirar a los niños, los dos entrenadores, fueron invitados por un morador del barrio a ver el partido en su cevichería.

Los profes, como les dicen los menores de cariño, aceptaron la invitación puesto que si se iban a sus casas corrían el riesgo de perderse la mitad del segundo tiempo. Acompañados por cuatro pequeños futbolistas del equipo y otros vecinos que se unieron al grupo, se acomodaron frente a un pequeño televisor pantalla plana para ver el segundo tiempo.

Ecuador ganaba 2-0 y todo parecía que iba a ser una gran noche para la Tricolor. “¿Cómo está jugando Pacho?”, fue lo primero que preguntó Cedeño cuando empezó a ver el partido. “Tenemos central para largo”, le dijo el anfitrión dando a entender que el quinindeño estaba jugando bien.

“Mira, Pacho es el que tiene esa muñequera blanca”, decía Kevin, uno de los alumnos de la escuela que también es defensa y que dice que algún día le gustaría jugar como Willian.

Todos miraban atentos el partido y cada intervención de Pacho en el juego iba acompañada de elogios. “Vamos Pacho”, “Vamos por Quinindé”, “Hijo de nuestra tierra”, eran algunas frases que se escuchaban mientras llegaba la noche. Al final, celebraron la victoria y mantienen la ilusión se seguir viendo a Pacho avanzando en la Copa América.

¿Quieres acceder a todo el contenido de calidad sin límites? ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!