Antes de las elecciones todo era besos y abrazos en Deportivo Cuenca. Hoy están divididos y Gabriel Castro, el hombre que supuestamente puso el billete para la campaña de la lista que lideraba la actual presidenta Nataly Villavicencio, se aparta del proyecto, porque no le habrían cumplido con lo prometido. Y de paso, está pidiendo que le devuelvan lo que invirtió, porque todo fue prestado.

“Hasta el momento he invertido 150 mil dólares de mi patrimonio en el proyecto ‘Por 50 años de gloria’. Pedí como garantía que me entreguen de manera formal la administración comercial del club, teniendo un NO como respuesta”, señala Castro en una carta publicada en redes sociales.

En tanto que Nataly Villavicencio señaló que entre las causas para la ruptura con Castro, fueron las cláusulas que pretendía imponer el empresario en el contrato de gerenciamiento, las mismas que no eran beneficiosas para la institución cuencana.

“Acá estamos para resguardar a la institución. No somos títeres de nadie”, señaló la dirigente del cuadro morlaco que este miércoles 18 de noviembre, visita a Barcelona por la LigaPro.

La dirigencia de Deportivo Cuenca continúa negociando con el resto del grupo inversor, ahora liderados por Juan Padilla y el abogado norteamericano Orville Dunk y se espera concretar la firma de un proyecto de gerenciamiento en los próximos días, para sacar del apuro al Deportivo Cuenca que está en peligro de perder la categoría en el actual torneo de LigaPro.