En el 2023 Kendry Páez, a los 15 años, debutó en la serie A de LigaPro. En ese momento se sentaba un precedente de manera radical y se demostraba que había que apostar a los jóvenes, donde está el presente y el dinero del futuro del fútbol.

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Independiente del Valle le apostó con todo. Páez ahora solo espera cumplir los 18 años para unirse al Chelsea de Inglaterra, donde ya entrenó por varios días.

La juventud es la apuesta que se hizo en el 2023. Los pasos de los del Valle fueron seguidos por Liga de Quito, que está a punto de recibir algunos millones por tener a dos cracks que no pasan de los 19 años.

En los albos está Óscar Zambrano, de 18 años, que lo quieren en Inglaterra. El volante estuvo presente en 23 partidos de la A y el entrenador Luis Zubeldía le dio acción en 1.493 minutos y algunos más en Copa Sudamericana. Ahora Zambrano está a un paso del fútbol inglés.

Lo mismo pasa con Sebastián González, de 19 años, que así como va, su estadía con el campeón de LigaPro en el 2023 será corta.

EN EL ASTILLERO

La otra cara pasó con el Astillero, donde a los jóvenes se les dio menos chance. En Barcelona está Allen Obando, que puede ir al fútbol de Francia, solo jugó 6 partidos y apenas tuvo 175 minutos en acción. El delantero, que está en la selección sub 23 de Ecuador, es la cara más visible de la juventud en el Ídolo, pero habrá que ver cómo le va hasta que se dé su paso al fútbol del exterior.

En el caso de Emelec, está Tommy Chamba, que con 18 años estuvo presente en 17 partidos e hizo un gol.

También está Joshep Espinoza, que volvió a jugar en Emelec después de un largo paso por Liga de Quito. El volante de contención hasta los 14 años fue parte de los azules, pero no le dieron la oportunidad, fue por eso que estuvo con los albos, pero regresó.

VENGA PARA ACÁ

El caso más notorio de la apuesta a la juventud es lo que pasó con Álex Rangel, de Técnico Universitario. Barcelona le ‘peló el ojo’ y este 2024 es nueva cara del Ídolo. El chico, de 20 años y que está en la selección sub 23, era el más ‘pelado’ de los rojos ambateños.

OJO CON ELLOS

Hay ‘pelados’ a los que se debe observar en el 2024, pero dependerá de los entrenadores. Ese es el caso de Maikel Reyes, que con 20 años, sorprendió en Delfín y estuvo en 22 partidos y hasta hizo un gol. Del orense Erick Plúas, de 20 años, se puede decir que ya es un jugador formado, estuvo un tiempo en Brasil en el 2023 y cuando jugó en el cuadro bananero solo faltó a un partido. En este mismo club destaca Bryan Quiñónez, de 19 años.

La juventud está para hacer la diferencia, le pagan menos al inicio y los pueden vender en millones.

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