A finales de julio de 2016, Independiente del Valle disputaba su primer final internacional y en su plantel destacaba José Angulo, autor de seis tantos claves para la gran campaña de los rayados que recibieron el nombre de matagigantes al dejar en el camino de la Copa Libertadores a equipos como los argentinos Boca Juniors y River Plate.

Con 21 años se soñaba con el surgimiento de un nuevo goleador para la selección. Y hasta el apelativo de Tin, como Agustín Delgado, histórico ariete tricolor, llevaba. Su contundencia y buen juego hicieron que el Granada español se fije en Angulo y lo fiche, a la par que la Tricolor le abría las puertas.

Pero esta historia tuvo un giro cuando el ariete fue suspendido por un positivo a cocaína, tras el análisis hecho por Conmebol antes de la final de la Libertadores disputada ante Atlético Nacional de Colombia.

De la mano se truncó su paso al fútbol europeo y quedó fuera del club español, en el que había sido presentado y formado parte de algunos entrenamientos. Fue una dura etapa para el Tin en la que pensó en dejar el fútbol. Inclusive estuvo preso por escándalos y problemas con el alcohol en medio de un irregular regreso a Independiente del Valle. 

Recibió el apoyo de su familia y del empresario José Chamorro. Las clínicas de rehabilitación y los entrenamientos con profesores privados se convirtieron en su nuevo mundo hasta que cumplió la suspensión.

Su reencuentro con el balompié se dio con Xolos de Tijuana (2020), para continuar en Barcelona, Manta y los rayados (2021) y en el Querétaro azteca esta temporada

Ahora el Tin (27 años) tiene una nueva oportunidad en el fútbol ecuatoriano, esta vez con Liga de Quito. Confesó que llega maduro, con las lecciones aprendidas de las caídas y con la convicción de convertirse en el grito de gol de los universitarios.

Entre risas confesó que las entrevistas, que antes le incomodaban, ahora las disfruta. Y una muestra es este diálogo con EXTRA.

¿Cuánto le ha ayudado a madurar todo lo vivido en su carrera?

Aprendí de golpes muy fuertes. Ahora soy otra persona, estoy muy tranquilo. Un ejemplo, antes me ponían nervioso las entrevistas, eso lo he superado. Aprendí mucho de los golpes de la vida.

¿Se considera un ejemplo de aprovechar las segundas oportunidades?

Todas las oportunidades hay que aprovecharlas y ahora así vivo yo. Ya sé lo que no tengo que hacer. Soy agradecido de las puertas que se me abren.

¿El balance que realiza del paso por el Querétaro mexicano?

Una experiencia muy bonita. México es un país muy lindo, me sentí muy bien. Me gustó mucho. Extrañaba la comida ecuatoriana.

¿Cómo fue la negociación con los albos?

El jugador tiene la última palabra. Se tenía algunas propuestas, pero me gustó la de Liga. Fue una negociación fácil y rápida. Se ha armado un buen plantel. Quiero demostrar mi talento.

El delantero vive de los goles, ¿cómo recuperar al Tin contundente de 2016 con Independiente del Valle?

Con mucho trabajo y esfuerzo. Afinar cosas para poder ser el goleador contundente de hace algunos años.

Independiente del Valle, Barcelona y ahora Liga de Quito. ¿Una gran colección de equipos?

He tenido la suerte de estar en los mejores clubes del país. Estoy decidido a que mis pasos dejen huellas y eso lo quiero demostrar en Liga.

¿Cómo tomas este nuevo reto en tu carrera?

Es un reto muy bonito, en un club grande. Me siento muy contento, trato de estar tranquilo, pero la felicidad me gana. A darle con todo y tratar de marcar goles para dar alegría a los hinchas.

Los hinchas de Liga de Quito se ilusionan con el tridente Alexander Alvarado, Lisandro Alzugaray y Tin Angulo. ¿Qué decirles?

Alvarado y Alzugaray son dos buenos jugadores. Aportar lo mío para sumar en el ataque y que le vaya bien al equipo.

¿Del plantel de los albos, compartió antes equipo con alguno de sus nuevos compañeros?

Los conozco, pero será la primera experiencia con la mayoría. Estoy seguro de que formaremos un buen grupo. Soy una buena persona, siempre caigo bien y me acoplo rápido a los grupos.

¿Ha preparado el festejo para cuando marque el primer gol con la U?

No. Prefiero que sean del momento. Lo que sienta en ese instante, con la felicidad de marcar y de poder ayudar al equipo con goles.

¿Qué le pidió el entrenador Luis Zubeldía?

El profe me dio la bienvenida. Me preguntó cómo estaba físicamente, si tenía alguna lesión. Vengo para ganarme un puesto.

¿Cómo se conlleva la presión de la hinchada al ser el encargado de marcar los goles?

Todo está en uno. Dar todo y hacer buenos partidos para que los hinchas estén contentos. Con goles devolver la confianza y el apoyo.

¿Quiénes son la inspiración del Tin?

Mis padres, esposa, hijos y mi representante siempre han estado como un gran respaldo. Son mi motor para seguir en esta carrera. Ahora todos son hinchas de Liga y están listos para gritar los goles que consiga.