Matías Oyola es una persona tranquila, de perfil bajo. Pero cuando se ponía la camiseta de Barcelona, al que defendió por 13 años, entre 2009 y 2021, se convertía en un jugador intenso, motivador y aguerrido, que hacía notar su presencia, según Ismael Blanco, quien fue su compañero por dos temporadas (2014-2016).

“Con la camiseta de Barcelona era otra cosa, se transformaba. Desde el camerino, con la arenga, se notaba la intensidad que le metía para que todos podamos entrar bien y motivados para hacer un buen partido. Siempre tiró para adelante, tratando de ayudar a todos sus compañeros, siempre estaba positivo”, reveló Blanco a Diario EXTRA.

Incluso Oyola se encargaba de darle la bienvenida a los nuevos jugadores, sobre todo a los extranjeros y les daba una pista de lo que significa jugar en el Ídolo. En 2014, previo a su incorporación a Barcelona, el Poni llamó a Blanco.

“Matías me ayudó desde antes de mi llegada. Yo hablé con él y me contó todo lo que significaba, toda la historia del club y la verdad que eso me ayudó para adaptarme, él ya llevaba mucho tiempo en el equipo y conocía bien el vestuario. Esto es bueno para el que viene de afuera, que alguien lo esté ayudando”, acotó.

En su estadio en los canarios, Oyola se convirtió en el líder del equipo apoyando a sus compañeros en todos los aspectos, incluso en la parte económica. Por aquello, Blanco considera que será difícil que encuentren un jugador como el Poni. “Ser el capitán no es solo sacarse una foto, es trabajar para lo que necesita el compañero; es decir, también hablar con los directivos cuando se adeudan sueldos”.

Y acotó: “Tener un jugador que se mate en la cancha por el equipo es fundamental. Yo como delantero jugaba tranquilo porque sabía que atrás lo tenía a él matándose por recuperar el balón. Será difícil que encuentren un jugador como él, Oyola solo hay uno, así como Messi es solo uno”, finalizó.