Si José José le cantaba al fútbol su famosa canción ‘40 y 20’ habría sido así: “40 y 20, es el juego lo que importa y no lo que diga la gente”. Independiente del Valle estaba calladito y en dos partidos hizo de las suyas, porque está con todos los ‘juguetes’ para causar furor en la segunda etapa.

En sus dos primeros encuentros dijo: “Epa, aquí estoy”, y eso ha metido miedo a equipos como Barcelona, Emelec y Liga de Quito, que se armaron para darle con todo.

La victoria de los Del Valle en el Capwell lo dejó claro. Está de ‘recandidato’ para ganar la etapa. Y no es que solo tiene una o dos figuras, sino que todos se adaptan a un juego colectivo que, cuando se ‘enchufan’, dan espectáculo.

La presencia del entrenador Martín Anselmi le ha dado contundencia y efectividad al equipo. Ha sido el principal motor para ponerle gasolina de alto octanaje a jugadores como Cristian Pellerano y Jaime Ayoví, quienes actúan como si fueran unos ‘peladitos’.

Pero Independiente es una mezcla de experiencia con juventud, una buena combinación con esas tremendas ganas de jugar y ‘comerse al mundo’.

A esto se suma lo que dijo Fernando Gaibor sobre su entrenador: “A Martín (DT) le gusta la posición del rival, le agrada desgastarlo, que cuando uno pierde la pelota el rival ya no tenga piernas”. Esto lo palpó Emelec el domingo pasado, cuando los Del Valle los derrotaron 3-2 en el Capwell.

LA CLAVE

El domingo se vio la mano de la experiencia y la juventud. Jaime Ayoví estuvo en todo el partido, se mandó 9 pases que tuvieron 100 % de precisión, también ejecutó un pase clave y para cerrar con broche de oro a La Yoya le hicieron dos penales.

Y cuando Independiente estaba ganando entró el dueño de los ‘pollitos’, el tipo de los 40 años que quiere festejar los 41 siendo campeón, el volante Cristian Pellerano, el argentino que lidera en el medio campo.

Cuando el jugador tenía 20 años y estaba dándole con todo en el fútbol recién nacían los que ahora son sus compañeros de equipo.

Y el gaucho no solo es experiencia a la hora jugar, sino también el que pone el ‘tate quieto’ cuando la juventud se quiere desenfocar, como el show que pretendían hacer Marcos Angulo y Marlon Mejía. El llamado de atención de Pellerano fue vital. También sobresalen jugadores ‘cancheros’ y con gran recorrido como Gaibor, Jonatan Bauman y Richard Schunke.

Y la juventud es otro gran puntal que tiene Independiente del Valle, ya que en el Capwell estuvieron ‘pelados’ como Marco Angulo que tiene 20 años y juega bien, y que además con la boca se manda un repertorio como si tuviera 30 años y eso influye a la hora de conseguir un resultado.

Cabe destacar también la responsabilidad en el arco de Moisés Ramírez, con 21 años, y la del veinteañero Jhoanner Chávez, que parece que tuviera más edad jugando en la LigaPro. Y eso solo para nombrar algunitos. Este equipo sí que pone a temblar a los demás en LigaPro.