Gisella Buendía es la cara y voz de Ecuador en la cadena de televisión deportiva ESPN. Es la primera comentarista ecuatoriana en ese medio y le va bien. Se la escucha en los partidos de copas Sudamericana y Libertadores y del fútbol europeo. Comenzó en Ecuador haciendo radio y televisión, y luego de dar el gran salto dice que a veces ni se lo cree.

Gisella abrió a EXTRA las puertas de su departamento de Palermo, Buenos Aires, para hablar de lo que vive. Recibe todos los días cientos de mensajes de apoyo... y uno que otro de envidia.

Se ríe cuando le refieren que habla con acento argentino y dice que siempre fue así. Claro que ahora se le sale uno que otro modismo debido a la convivencia diaria.

- Gisella, la voz, los ojos y el sentimiento ecuatoriano de ESPN

Qué gusto recibir a EXTRA en mi casa, es algo increíble poder volver a verlos.

- Como que se vino muy lejos de Ecuador

Así parece, pero en la próxima me traen unos chifles y el buen atún, y otra vez chifle.

Eres la primera ecuatoriana comentarista en una cadena como ESPN.

Feliz.Esa es la palabra que te resume todo, claro que extraño mi país, mi familia. Ha sido un cambio total, no solo que se cambió el trabajo, también de amigos, de barrio, de clima, de todo; cambié de costumbres, de leyes... pero agradecida de todo, voy para dos años y cuando estoy en el estudio, todavía no me la creo que esté trabajando para ESPN.

- Eso de no creerse dónde ha llegado es bueno

No me la creo, valoro donde estoy. Pero nada de creerme, un día estás al otro no se sabe. Me parece un sueño todo lo que estoy viviendo.

- Los mensajes en redes te hacen saber a dónde has llegado, unos para bien, otros con mensajes un poco envidiosos.

Cada vez me voy ganando el respeto de la gente de Ecuador y Latinoamérica.

- ¿Hay sacrificios?

¿Aparte del frío? No quiero repetir el discurso de los jugadores, que extrañan el bolón, el jugo de naranja, los amigos... pero sí se extraña, es real. En mi caso lo superé, lo fuerte ha sido tener a mi familia lejos.

- ¿Cuando le dijeron para venir a ESPN, pensó que iba a ser así el camino. Se lo ve muy exitoso?

Cuando me ofrecieron el trabajo nunca lo dudé, no tenía idea a lo que me iba a enfrentar, pero me gusta jugármela, y ese tipo de cosas no lo pienso mucho y tomé el riesgo, para bien o para mal. La Gisella Buendía que algún día regrese a Ecuador no va a ser igual.

- ¿Qué es lo que más le sorprende en ESPN?

La cantidad de personal capacitado con la que trabajo, sé que puedo aprender un montón de ellos, todos los días, desde el camarógrafo hasta quien me maquilla.

- En periodismo deportivo hay dos puestos que son los que todos quieren estar, el narrador y el comentarista...

Todo comenzó en un partido amistoso del Bayer 04 Leverkusen donde estaba Piero (Hincapié), claro que había comentado antes para GolTV, pero acá todo era nuevo, era una liga europea. Me pasó de todo, llegué con las justas, no había carro, entré nerviosa, pero a los cinco minutos todo estaba bien.

- ¿Ahora se siente más cómoda?

Claro que sí, pero tengo que mejorar cada día.

- ¿Es la primera mujer comentarista que está en una cadena internacional?

Gracias a Dios, sí, soy la primera, se siente bien. Ojo, no es fácil llegar, uno trabaja para eso, claro que a veces no sabes si puedes llegar, pero siento que me falta mucho y quiero ser mejor.

- ¿Considera que ahora es una referente para las chicas que quieren ser como Gisella Buendía?

Me escriben muchas chicas, que les gustaría seguir lo que vengo haciendo y eso es bueno. Ahora con el plus de que estoy en una cadena internacional.

- ¿La familia qué dice?

Mi mamá no se pierde ningún programa. Y me está asesorando siempre, de cómo me visto, cómo me peino, qué zapatos uso.

- ¿Un mensaje de aliento que recuerdes de los fanáticos?

Que lo mío no solo es físico, sino que sé de lo que estoy hablando.

- ¿Algún comentario que le haya hecho llorar?

Solo Almada (ex DT de Barcelona) me hizo llorar. La verdad que nada de lo que han dicho me hace llorar, soy muy llorona, a veces la gente dice cosas bien feas solo porque tiene una cuenta de Twitter, pero duele, a pesar de que llevó 14 años de carrera.

- ¿Quién es el dueño de sus ojos?

Si me habla de una relación amorosa, no sé si es dueño, pero sí es mi compañero, mi pareja, comenzamos a salir cuando ya me venía, y le dije que me venía, y tenemos una relación a distancia; muchos piensan que no funciona, pero encontré una persona que me da paz y confianza y nos vemos cada cierto tiempo.

- ¿La gente le dice que es argentina, cómo hace con el ‘dejo’ de este país?

Eso es lo que más me fastidia de la gente, pero yo hablaba así desde que vivo en Ecuador, siempre fue así, creo que tenía un ‘dejo’ argentino. Entiendo que es la opinión y la respeto, pero no es así, amo a mi país, soy guayaca y trato de ser lo más guayaca al aire. Pero hay cosas que las absorbo porque vivo aquí.

- ¿Le piden que hable como argentina?

No, mi jefe me pide que hable como ecuatoriana, quieren que yo represente al Ecuador, claro que a veces no me doy cuenta que me sale alguna palabra argentina, pero la gente a veces está más pendiente de cómo me exprese, están como contándome las palabras para caerme, pero eso creo que es normal, no ver a una ecuatoriana en ESPN.

- ¿Con qué equipo la relacionan más?

Con Independiente del Valle, es la mejor imagen que tenemos, todos te preguntan por el equipo, lo que hace la Tri, la actividad de Moisés Caicedo.

- ¿Qué sacrificio más ha hecho al estar lejos?

A mis 33 años como que ya tenía mi vida enrumbada en Ecuador, tenía mi departamento, mi independencia y todo. Acá estuve lesionada por tres meses y debía de valerme por mí sola y lo hice.

- Está en el top del periodismo, ¿a qué más apunta?

No sé, creerlo ni yo sé, me fui al Mundial de Catar, tengo trabajo, hago lo que me gusta, hago fútbol por todo el mundo. Estoy lista para lo que sea, pero no es lo que quiero ahora y eso es mejor así.

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