Djorkaeff Reasco entró y tapo bocas y la hinchada salió feliz, fue el salvador de la noche donde Barcelona, con una alineación rarísima, encontró a un cerrado El Nacional que lo hizo sufrir durante 73 minutos, pero al final los amarillos sumaron los tres puntos.

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Y el entrenador amarillo, Diego López, ha jugado siete partidos en LigaPro y no ha repetido nunca la alineación; en realidad, no se sabe quiénes son los titulares y quiénes rotan.

Para enfrentar a El Nacional, dejó en la banca a quien se pensaba que no lo iba a dejar, pero le dio descanso a Javier Burrai, pensando en los partidos que tendrá el 25 y 28 de abril del 2024: Copa Libertadores ante Sao Paulo en el Monumental y el Clásico del Astillero en el Capwell.

Parecía que el entrenador sumó mal los días, ya que dio descanso a los llamados titulares, sabiendo que hay una semana para el próximo partido.

Ante El Nacho, hizo un mix de jugadores con Víctor Mendoza en el arco, la defensa colocó a Suárez, Ramírez, Sosa y Chalá, en la media volvieron Gaibor y Arroyo, dejando en la ofensiva a Corozo, Díaz, Rojas y Obando; hasta ahora, el entrenador amarillo no tiene un 11 definido.

Los primeros 45 minutos, El Nacho con un equipo livianito puso en aprietos a los amarillos, que no lograban hilvanar jugadas para llegar al arco de Cabezas. El primer tiempo fue tan aburrido que las jugadas de fricción fueron las que más se hablaron.

La dupla entre Arroyo y Gaibor estaba divorciada, y el fútbol que generan Damián Díaz y Joao Rojas se había quedado en el camerino; Barcelona fue bloqueado en los primeros 45 minutos, se le cerró en todo.

Un Barcelona sin nada de agresividad en busca del arco contrario; en el primer tiempo, El Nacional fue El Nacional, su estilo sin deslumbrar amarró el encuentro. La desesperación hizo que a los 56 minutos, Diego López hiciera tres cambios; entraron Oyola, Trindade y Preciado, y salieron Corozo, Arroyo y Rojas, este último tuvo uno de los partidos más flojos, luego sacó a Obando por un golpe y entró Reasco.

Barcelona fue un manojo de nervios, e incluso pasó el susto de un penal que fue pitado por falta de Chalá a Burbano, pero el VAR dijo que no.

Pero Barcelona debía ganar a lo Barcelona; la primera pelota que tocó Reasco y adentró salvó la noche; era la única manera de ganar, un centro de viveza de Díaz en el centro, Adonis hace el amague y Reasco hizo su primer gol.

El Nacho al final asustó y el fantasma de los últimos segundos volvió a asustar al Barcelona, pero esta vez no pasó nada.

El ídolo ganaba al susto, pero ganaba, que era lo que sus hinchas querían. Los amarillos suman 12 puntos y tienen dos partidos diferidos.

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