“Aconsejo el uso del champú en barra porque es muy suave para el cabello, ya que no contiene sulfatos ni parabenos que pueden eliminar los aceites esenciales que hidratan el pelo de forma natural. Otra ventaja es que contiene ingredientes naturales que son buenos para el cuidado capilar como aceites naturales (argán, aceite de coco, aceite de romero, entre otros), vitaminas y minerales. Si lo deseas puedes usar tu acondicionador favorito", aconseja Lorena Vanoni, empresaria cosmética.

Ahorran espacio en el baño y lo liberan de la presencia de esas botellas comerciales. Son súper prácticos para viajar, puedes llevarlos en tu carry on sin el temor de que derrames o problemas por el peso. Lo mejor es que te ahorran dinero y son amigables con el medio ambiente.

Duradero

Se calcula que una barra de champú de 100 gramos rinde por lo menos 80 lavadas, un equivalente a 3 frascos de los convencionales. Un ahorro importante para el bolsillo.

Ecológico

Según National Geographic, al año, los océanos reciben cerca de 9 millones de toneladas de plástico. El uso del champú en barra contribuye a la lucha contra el uso de botellas plásticas. Las barras de champú suelen venderse en envolturas biodegradables.

Para cada tipo de pelo

Para los cabellos secos o decolorados se sugiere los que contienen grasas hidratantes como la crema de coco o la lecitina de soya. Los preparados con té verde son idóneos para cabellos mixtos. Mientras que los de limón y menta van bien con el pelo graso. Los que llevan miel, avena y aceite de coco reparan y suavizan los pelos quebradizos.

Químico o natural

Normalmente el champú que usamos a diario se lo fabrica con detergentes y productos químicos como sulfatos y siliconas, mientras que el sólido tiene aceites vegetales, vitaminas y agentes espumantes. Está compuesto de arcilla verde, aceites esenciales, extractos de coco, almendras o karité.