Los mitos, leyendas y cuentos son la base del origen de Sígsig, cantón azuayo que este viernes cumple 157 años.

El historiador Antonio Martínez y el escritor Raúl Cabrera refieren que una de las leyendas cañari más conocida es la de las ‘Guacamayas’.

Cuenta la leyenda que los hermanos Ataorupangui y Cusicayo habían salido de Mulasamana, templo del dios de Ogroña, para ir de caza. Cuando ascendían al cerro Fasayñan los sorprendió un diluvio. El agua anegó todo y los cazadores debieron subir a la cima para guarecerse en una cueva.

Cuando dejó de llover, Ataorupangui y Cusicayo salieron a buscar alimentos. Al regresar, en la cueva había comida y bebida. Estos alimentos habían sido dados por dos seres que eran “medio cuerpo mujer y otro medio de pájaro”.

Estas aves, conocidas como aguaques o toritos, que significa guacamayas, salvaron a los hermanos y con ellas, los jóvenes repoblaron el pueblo cañari.

Este registro, que es parte de la historia y relatos ancestrales de Sígsig, se tratarán en un conversatorio con el cual finaliza la celebración por la cantonización. (JM)

Los vestigios de lo que habría sido la fortaleza que él edificó son parte de la riqueza del cantón azuayo.

Además, el año pasado, autoridades locales hicieron una petición al Royal Collection Trust de Inglaterra para tratar de recuperar la corona de oro de este líder.