La del italiano Enrico Zozo fue una historia de amor que terminó en engaño y fracaso, pero le dio la oportunidad de conocer personas de buen corazón que, pese a sus escasos recursos económicos, lograron darle sustento durante tres años, hasta abril de 2023.

Lo paradójico en este caso es que el europeo, de 62 años, dejó la ciudad más rica de Italia, Milán, para radicarse en un barrio popular del cantón Huaquillas, en Ecuador, en la frontera con Perú.

La decisión la tomó 14 años antes por un asunto sentimental, cuando se enamoró de una ecuatoriana, por quien dejó todo en su país (incluyendo a su hija) para formar un nuevo hogar.

Sin embargo, nada resultó como esperaba, porque al llegar al país sudamericano bastó poco tiempo para que su amada sacara a la luz sus verdaderas intenciones: apoderarse de su dinero.

En una entrevista brindada al programa de televisión italiano Le Iene, Enrico explica que su exmujer le pidió 10 mil dólares para atender unos problemas de salud de un hijo de ella, pero todo fue una mentira, porque luego de recibir el dinero, ella desapareció.

No obstante, pudo reponerse económicamente porque recibía una pensión en su país natal, con la que podía pagar sus gastos de alimentación y vivienda. Además, compró un terreno, en el que construyó una pequeña casa de caña guadúa, y un cuadrón, con el que se movilizaba.

El extranjero había aprendido un poco de español, lo que le servía para comunicarse con sus vecinos y llevaba una vida austera, tranquila, hasta que en mayo de 2018 caducó la tarjeta de débito con la que mensualmente retiraba el dinero que le permitía subsistir.

Enrico se comunicó con la entidad bancaria para buscar una solución, pero le explicaron que era un trámite que solo podía hacer personalmente, en Italia.

Sus ahorros no le permitían viajar, pero con estos y con la ayuda de sus amigos logró llevar una vida en paz por un par de años más, hasta que tuvo que hacerse cargo de él un vecino llamado Juan, un tendero del barrio con esposa y siete hijos.

Pese a que ganaba 15 dólares diarios, el lugareño nunca halló problema en mantener al italiano, según dijo al programa Le Iene. Pero todo se complicó cuando Enrico sufrió un derrame cerebral, en 2022. Cayó de su cama y la parte derecha de su cuerpo quedó paralizada.

Paulatinamente, Juan llevaba a Enrico a diferentes centros médicos, pero su cuadro se complicaba cada vez más, hasta que su historia llegó al programa de televisión italiano y decidieron rescatarlo.

A inicios de abril de 2023, el hombre, entre sollozos, se despidió de sus vecinos y fue llevado de vuelta a Italia, donde su hija, de 38 años, lo recibió en el aeropuerto internacional de Malpensa y lo perdonó.

Ahora Enrico se recupera bajo cuidados de médicos especializados, quienes revelaron que el hombre estaba a poco tiempo de sufrir un derrame interno y fallecer.