Cuando se habla de fingir orgasmos, esto siempre se lo relaciona a las mujeres. Sin embargo, el sexólogo Xavier García aclaró a EXTRA que los hombres también pueden llegar a simular que han llegado al clímax.

Esto, aunque parezca increíble, según el experto, se basa en diversos motivos. Sin embargo, la causa principal que lleva a los hombres y las mujeres a fingir el orgasmo es esperar a que el acto sexual culmine sin herir los sentimientos del o la compañera.

Esto porque, muchas veces, alcanzar el clímax es complicado y el cuerpeo puede hacerse ‘eterno’, en la espera de que la eyaculación llegue.

Un estudio reciente publicado en Journal of Sexual Medicine (Diario de la Medicina Sexual) por investigadores de la Universidad Brigham Young, en Estados Unidos, analizó el orgasmo en 1.683 parejas heterosexuales recién casadas. Una de las principales conclusiones era que si bien el 87 % de los maridos llegaba de forma constante al orgasmo, solo lo hacía el 49 % de las mujeres.

Otra encuesta realizada a más de 1.400 personas por la marca de productos eróticos Bijoux Indiscrets, arrojó que el 21,2 % de los hombres había fingido el orgasmo alguna vez (versus el 52,1 % de mujeres).

Más difícil

Aunque para ellos, la ‘actuación’ es más compleja, esta sí se puede realizar, sobre todo cuando existe el uso del preservativo de por medio. Lo que es más complejo, precisa García, es la excitación.

“Los hombres sienten vergüenza, por la cultura machista, de decir que no tienen ganas de tener sexo. El hombre, si no tiene deseo y ‘quiere cumplir’ a su pareja, piensa que debe tener una erección”, comentó. Es importante recordar que para dar placer no solo se hace mediante el coito, sino que se puede realizar con sexo oral o masturbación.

Además, añadió que tenemos una cultura sexual ‘finalista’, en la que se considera que si no hay un orgasmo, la relación sexual no es satisfactoria. No obstante, esto no es cierto.

El especialista añadió que lo ideal sería no fingir orgasmos, sino hablar con la pareja sobre lo que nos gusta y no nos gusta. Añadió que esto puede convertirse en un problema si es que sirve para eclipsar algún problema de salud que, a la larga, vaya ocultando una vida sexual no satisfactoria y cree frustraciones.

Hay que buscar el origen del problema y acudir a un especialista, si es que ya existe incomodad en la pareja.