Nueva York implementó una regulación más estricta para enfrentar la creciente problemática de conductores que alteran, ocultan o manipulan las placas de sus vehículos con el fin de eludir los controles de tránsito y el pago de peajes. Con estas nuevas medidas, se busca garantizar el correcto funcionamiento de los sistemas de monitoreo automatizado y mejorar la seguridad vial en el estado.

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Uno de los cambios más destacados establece que las placas de los vehículos deben estar completamente visibles, bien sujetas y libres de cualquier material reflectante o sustancia que dificulte su lectura. Además, se prohíbe el uso de plásticos, vidrios u otros objetos que puedan obstruir la visibilidad de las matrículas. Los conductores que incumplan estas normas podrían enfrentarse a la revocación de su licencia de conducir, una medida severa que busca garantizar la efectividad de los sistemas de control.

Sanciones por alteraciones en la placa del vehículo

La nueva regulación también exige que las placas se mantengan limpias y sin obstrucciones. De acuerdo con la normativa, la altura de la placa debe estar entre 30 y 120 centímetros del suelo, y cualquier alteración que dificulte su legibilidad será motivo de sanción. Estas medidas están diseñadas para evitar que los conductores evadan los controles de seguridad y el pago de infracciones, maximizando la efectividad de las cámaras de monitoreo de tránsito.

Otra de las disposiciones clave es la prohibición de cubiertas que oculten las placas de los vehículos, las calcomanías de registro o el número de identificación del vehículo (VIN). El objetivo de esta medida es reducir el número de "vehículos fantasma", aquellos que circulan sin ser identificados y que logran evadir el pago de multas.

Impacto de las cámaras de control en la reducción de infracciones

Según el Departamento de Transporte de Nueva York (NYC DOT), la implementación de cámaras de velocidad ha tenido un impacto significativo en la reducción de infracciones, con una disminución del 94 % en las áreas monitoreadas. Sin embargo, aún persisten conductores reincidentes que representan un peligro para la seguridad vial, lo que ha llevado a las autoridades a reforzar aún más las medidas de control.

En paralelo, algunos estados como Pensilvania están tomando medidas similares para limitar el acceso de los inmigrantes indocumentados a la licencia de conducir. A través de un proyecto de ley, los gobernadores buscan reducir la presencia de personas sin estatus legal en el país, lo que genera un debate sobre las políticas migratorias y la movilidad de los inmigrantes.

Estas nuevas iniciativas en Nueva York y otros estados subrayan un esfuerzo más amplio por mejorar el control vehicular y garantizar que los sistemas de monitoreo sean efectivos, a la vez que se abordan preocupaciones relacionadas con la seguridad y el cumplimiento de las normativas viales.

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