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Tres casas se quemaron en la Isla Trinitaria
Una de las propiedades era usada como bodega para guardar mercadería para fiestas infantiles. Nada de ello pudo salvarse
A Byron Barcos ya no le sirven ninguna de sus 13 lavadoras. Él era el 'duro' cuando sus vecinos querían lavar la ropa, pues siempre le alquilaban sus máquinas. Pero de aquellos electrodomésticos que le servían de sustento solo quedan metales chamuscados.
Su penosa realidad es el efecto de un incendio, originado en su vivienda, en la cooperativa Nelson Mandela 2, de la Isla Trinitaria al suroeste de Guayaquil. La emergencia sucedió a la medianoche de este jueves 18 de junio de 2020 y dos propiedades más también resultaron afectadas.
En el momento en el que inició el fuego, Byron no se encontraba en casa. Estaba en el domicilio de un allegado. Pero ni bien le avisaron, fue apresurado a ver qué pasaba.
Las llamas, según cuentan sus vecinos, se originaron en la parte posterior del predio. Y a los pocos minutos se pasaron a la casa de al lado, en la cual había una bodega y un departamento. Las tres propiedades resultaron afectadas por el fuego.
"A lo que llegué el fuego estaba bastante avanzado, no pudimos rescatar nada, todo se perdió", lamentó el hombre, quien reside con su madre y un hermano en el lugar.
El Cuerpo de Bomberos de la urbe llegó al sitio para apoyar en las labores de extinción del siniestro. Según informó el ECU-911 Samborondón, fue necesaria la intervención de seis unidades, tres tanqueros, dos carros cisterna, una unidad de rescate, una unidad de materiales peligrosos y tres ambulancias.
"También perdí una moto - triciclo y ahora estoy con las manos cruzadas", indicó el ciudadano.
En tanto, María Vélez, otra de las habitantes de la populasa zona, rentaba una bodega al lado de la casa de Byron. La utilizaba para guardar mercadería para fiestas infantiles, pero nada pudo salvar.
Comentó que sus pérdidas ascienden a los 20.000 dólares. Todos esos productos los tenía almacenados porque no podía trabajar vendiéndolos en época de pandemia y tenía la esperanza de recuperar en algo lo que invirtió en ellos una vez que la ciudad pase al semáforo sanitario verde.