La tarde de hoy, lunes 27 de mayo, el juez de la Unidad Judicial Penal, Vicente Guillen Chávez, dictó orden de prisión preventiva en contra de Manuel y Jean Carlos Quirumbay junto con Johnny Barzola y Wilson Tomalá, acusados de participar presuntamente en un robo a una vivienda en el sector de Punta Blanca, donde se desarrollaba una fiesta la noche del pasado sábado.

La instrucción fiscal durará 30 días. Los defensores de los acusados deberán mostrar su inocencia. Los aprehendidos son habitantes de dos comunas de la parroquia Colonche, sus familiares aseguran que los están confundiendo.

El fiscal John Tipantasi, que sigue la causa, manifestó que siete de las personas presentes en la reunión social reconocieron a uno de los detenidos. “Al líder de la banda los tatuajes en sus brazos lo delatan. Los otros como andaban encapuchados es más difícil, pero dicen los perjudicados que tienen similitudes en sus rasgos físicos con los asaltantes”, señaló la autoridad.

A los sospechosos se los capturó a las 03h00 del domingo, 26 de mayo, en la población de Río Seco de la parroquia Colonche acusados de haber robado una tablet a un joven del lugar. Esa madrugada la Policía buscaba a los maleantes que perpetraron el robo en Punta Blanca y su vinculación ocurrió después de mostrárselos a las víctimas del atraco en la fiesta, quienes los acusaron de ser los asaltantes.

El jurisconsulto John Rodríguez, defensor de dos de los aprehendidos, indicó que a sus clientes se los está inculpando de algo que ellos no cometieron. Para el profesional del derecho no existen pruebas suficientes para acusarlos. Señala, además, que la detención se dio a kilómetros de distancia de Punta Blanca, y que en la denuncia puesta por los afectados se indica que los delincuentes tenían acento colombiano y que eran agentes de la DEA.

“Ninguno de los privados de libertad habla como colombiano, tampoco tienen el porte, peor la contextura para simular que son agentes de la DEA. Resulta gracioso pensar aquello”, manifestó el abogado, quien estima que por ser una familia pudiente la asaltada, se pretende acusar a personas inocentes de un delito que no cometieron, peor aún sí son habitantes de poblaciones rurales.

Los allegados de los detenidos se mostraron sorprendidos al conocer del hecho que se los acusa, aseveran que la noche del sábado sus parientes no salieron de su zona, pues se encontraban de festividades en la comuna Febres Cordero, reconocen que al calor de los tragos se sustrajeron la tablet de un muchacho y por eso la Policía los capturó, pero que ellos no serían los que robaron en Punta Blanca.