Exclusivo
Quito
Listas las 'viudas' para Año Viejo: ¡Estas Bichotas no lloran!
Dos amigos ya hicieron su prueba de maquillaje para tener todo listo para este 31 de diciembre. Estarán en el sur de Quito.
Pablo Iza y Brandon Argüello alistan sus mejores galas para la noche de este 31 de diciembre. Este año piensan “reventar” la avenida Ajaví, en el sur de Quito.
Estos amigos llevaron el show de las tradicionales ‘viudas’ de fin de año al siguiente nivel desde hace cuatro años. “Hago piruetas en el piso porque bailo break dance”, dice Brandon, de 22 años.
Pablo, de 37, no se para de manos, pero organiza todo lo demás. Este fin de año hasta llevará un DJ para amenizar la fiesta en la calle. “Ya estamos promocionando en redes sociales”, comenta.
Ya tienen listas las pelucas y los maquillajes. “Con esta pareceré la Bichota”, bromea Pablo al probarse el cabello azul turquesa, tal como lo llevaba la cantante Carol G.
Los preparativos
Los vestidos de tecnocumbieras todavía están en el ‘horno’, pero serán coloridos y llevarán botas musleras para entrar en el personaje.
Junto a Pamela Núñez, novia de Pablo, hacen una prueba de maquillaje para el equipo de EXTRA. “Le ayudo a vestirse, le pongo las pestañas postizas”, comenta Pamela.
Pablo y Brandon se pusieron como nombres artísticos La Débora y La Gatita. Sobre sus rostros les colocan base, polvo, sombras rosas, delineador negro y labial rojo. Lo más llamativo posible para no proyectar la imagen de ‘viudas’ lloronas, sino de ‘solteronas’ alegres por el 2022 que está por ‘morir’.
Hay que combinarlo todo con los colores de los vestuarios, aunque no se atreven a usar tacones por comodidad. Este proceso les toma al menos una hora, por lo que este sábado se alistarán desde las 18:00 para saltar al ‘escenario’ a las 19:00.
“Estamos emocionados porque también vamos a repasar una coreografía acorde a los trajes”, agrega.
A ver qué pasa…
Hace cuatro años todo empezó como una ‘joda’. “Salgamos a la esquina, veamos qué pasa”, se dijeron entre los amigos de Pablo.
Él, con un poco más de experiencia en la organización de eventos, sacó los trajes que empleaba para sus shows de horas locas.
“Ese año estábamos de Maléfica y de princesas”, cuenta Pablo, quien también se desempeña como locutor en una radio capitalina.
Entonces salieron a la esquina de la calle Paquisha y avenida Ajaví para detener a los conductores, hacerles un baile sensual y pedir colaboración para el agonizante ‘viejo’ de 2018. “Creímos que no nos iba a ir bien, pero tuvimos buena acogida. Solo sacamos un parlante con música”, recuerda Brandon.
El año pasado, aun con una pandemia de la COVID-19 en vigencia, se sorprendieron al ver que la aceptación por su actuación había crecido. Se congregaron en esa esquina al menos unas mil personas.
Con cuidado
Aunque la acogida ha sido buena, no ha faltado quien se haga a un lado porque no le gustan las ‘viudas’. “Nosotros no caemos en la vulgaridad, somos respetuosos y tenemos algunas reglas”, explica Pablo.
Se controlan. No se trepan sobre los capós de los vehículos porque se dañan, tampoco obligan a los transeúntes a colaborar con dinero.
“Para desinhibirnos nos tomamos unos traguitos, pero no tantos porque debemos estar alertas”, comenta Pablo.
En años anteriores han estado a punto de ser atropellados porque algún conductor solo optó por acelerar. Sin embargo, este último día de 2022 pretenden pasar el récord de ganancias de 250 dólares. Tienen todo listo.