Christian Luna no pretende declarar unión de hecho en el Registro Civil ni casarse con su novia para poder circular libremente en su motocicleta por las calles de Quito.

El ciudadano tiene algunas dudas con respecto a la nueva ordenanza aprobada por el Municipio de Quito, la cual prohíbe la circulación de dos o más personas en una moto. Esto, en el contexto de inseguridad que se vive en el país.

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Él utiliza este vehículo para transportar a su pareja a su lugar de trabajo y para dirigirse al suyo. Una de las siete excepciones que flexibilizan la normativa y permiten que dos personas circulen en una moto es que el o la acompañante de quien conduce sea cónyuge o tengan unión de hecho.

Los motorizados pueden llevar un copiloto mientras sea: hijo o hermano, persona con discapacidad, adulto mayor, menores de 12 años, servidores públicos en cumplimiento de sus funciones y, si es el caso, dos mujeres en una motocicleta.

Luna ha visto durante sus recorridos que los delincuentes que van en moto suelen arranchar las pertenencias a los ciudadanos descuidados. En otro tipo de modalidades, según su experiencia, el sujeto que va de acompañante se baja del vehículo, amedrenta a su víctima con algún arma y le quita sus cosas.

Los robos, el secuestro, el sicariato y el transporte de estupefacientes son los delitos más comunes en los que están involucrados los delincuentes que se movilizan en un vehículo de dos ruedas en la capital.

Un informe de la Policía al que tuvo acceso EXTRA indica que entre enero de 2021 y agosto de 2023 hubo en promedio 122 casos mensuales de infracciones penales.

En una cuadra de la Martha Bucaram, en el sur de Quito, dos hechos violentos ocurrieron en menos de tres semanas. En el primero, un sujeto asesinó a dos personas en una barbería y huyó en una moto. En el segundo, dos sicarios llegaron en un vehículo de este tipo, ‘repartieron’ bala a otra barbería e hirieron a un adolescente.

El mayor Danny Carvajal, jefe del Grupo de Operaciones Motorizadas del Distrito Manuela Sáenz, señala que esta medida solo ayudaría a reducir la percepción de inseguridad que tiene la ciudadanía. “Quienes ven dos personas en una moto tienen miedo de que les pase algo”.

Sin embargo, el oficial aclara que se debe pulir la ordenanza para regular a los motorizados que hacen delivery y que suelen cometer delitos bajo esa fachada. O extender la norma a zonas rurales de la capital en las que los delincuentes utilizan este vehículo para cometer sus fechorías.

Por su parte, Kléber Carrión, fundador de la Unidad Antisecuestro y Extorsión (Unase), explica que este tipo de ordenanzas no suelen ser fructíferas. Según él, en otras ciudades del país como Guayaquil y Santo Domingo se han implementado, sin obtener un resultado satisfactorio.

Para el experto, existe una fragmentación en la seguridad y no se puede generar un control sobre la problemática. Sostiene que, por una parte, los policías no pueden hacer nada en temas de circulación vial y, por otra, los vigilantes de tránsito no tienen las herramientas y preparación para contrarrestar a un delincuente.

Carrión plantea que la Policía Nacional debería volver a tener la competencia en materia de tránsito para combatir a la delincuencia.

El 2 de junio de 2022, el Concejo Metropolitano de Quito aprobó una normativa que prohíbe el porte de armas blancas en la ciudad. Los cuchillos, navajas, puñales, manoplas, machetes, hachas, sables o espadas fueron prohibidos. 

Sin embargo, esta ordenanza causó algunos problemas porque en las primeras dos semanas, las personas sancionadas fueron los comerciantes que utilizaban cuchillos para rebanar o cortar los alimentos que ofrecían al público.

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