Exclusivo
Actualidad
Quito: Dudas por la elección de nuevo presidente
Los rostros para las elecciones emergentes están haciéndose visibles antes de que se oficialicen candidaturas. Dos especialistas opinan sobre este panorama.
Las nuevas elecciones presidenciales se vienen el 20 de agosto y la gente está con la duda de quiénes serán los candidatos que disputarán el sillón de Carondelet que dejará vacío Guillermo Lasso.
Esa fecha está prevista para las votaciones de primera vuelta –en la que también se elegirán a los asambleístas–. Y quince días después, de ser necesario, se daría la segunda vuelta. Y si bien los nombres y rostros de presidenciables están haciéndose públicos, aún no hay nada definido.
En un recorrido que EXTRA hizo por Quito, los votantes opinaron sobre las cualidades que debe tener el nuevo ‘huésped’ del palacio presidencial.
Trabajador privado
“Un presidente debe ser honesto y serio. Es decir, que si llega al cargo debe cumplir con lo que ofreció como candidato. Pero también debe buscar a gente que lo apoye en todos sus proyectos”, opina Karina Calvopiña, de 27 años, quien trabaja en un laboratorio clínico en la capital.
Nelson Albán, capitalino de 73 años, coincide con ella al decir que se necesita honestidad para ejercer el rol de presidente de la República. “Para nuestro pueblo, lo más conveniente es que no vuelvan los que ya sacaron (los exlegisladores). Es mejor que se vayan”.
Sin embargo, para Mauricio Alarcón, analista político, puede pasar que los mismos exasambleístas o excandidatos presidenciales se presenten a votaciones. “En Ecuador hay muchos movimientos con capacidad para postular gente. Y, conociendo el ego y la vanidad de nuestros políticos, con seguridad tendremos a gente que ni siquiera hemos visto, con tal de ganar un poco de fama”.
Estudiante
Candidaturas
Pero la gente cree que un candidato no solo debe poseer un buen perfil de valores en los que la honestidad encabece la lista. Diego Abril, trabajador privado, considera que es hora de que los políticos jóvenes estén en la papeletas para elegir al presidente y legisladores.
“Las nuevas promesas son las que pueden sacar adelante al país. Ellos serán quienes no se aprovechen del cargo, sino que llegarán para ayudar”, expresa el ciudadano.
Por eso, según Marcel Merizalde, catedrático y analista político, la muerte cruzada decretada por el presidente Lasso –que es la disolución de la Asamblea–, es un momento crucial para la democracia ecuatoriana.
Ciudadano
Pero también es una época de mucho análisis, porque la crisis política que podría venirse conllevará mucha hostilidad. “Nunca se pensó en el impacto que tendría aplicar la muerte cruzada en una sociedad políticamente inestable e inmadura como la ecuatoriana”, detalla Merizalde.
Y una vez en el poder ¿qué se viene? “Lo más importante es resolver el tema de la inseguridad. Con ello se podría incluso hablar de los temas económicos, pero debemos tener paz”, advierte Ángel Guerra, de 23 años, quien tiene fe en que el candidato que gane hará lo mejor para el país.
Una oportunidad para elegir mejores autoridades
Ayer se realizó el tercer pronunciamiento de un movimiento social en torno a lo dispuesto por el presidente Guillermo Lasso. En esta ocasión Gary Espinoza, líder de la Confederación Nacional de Organizaciones Campesinas Indígenas y Negras (Fenocin), dijo que lo decretado es una oportunidad para elegir nuevas autoridades.
Pero también detalló que estarán en asambleas permanentes para analizar el panorama político que se dé conforme tome decisiones el primer mandatario.
Trabajadora en laboratorio