En diciembre se incrementa la manipulación de la pirotecnia entre los ciudadanos, debido a las festividades como la Navidad y Fin de Año. Sin embargo, muchas personas, en su mayoría menores de edad, no miden las consecuencias de usar el material explosivo. 

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Según la Secretaria de Gestión de Riesgos de Guayaquil, los efectos de la manipulación de fuegos pirotécnicos y productos explosivos pueden causar incendios, quemaduras, lesiones, mutilaciones o incluso ser mortal.

Ha ocurrido casos como el de Emmanuel Guevara, un guayaquileño de 29 años que es diseñador de imprenta en el centro y quien hace más de diez años sufrió un accidente con un 'tumba casa', artefacto explosivo comúnmente usado en las festividades de fin de año en Ecuador. Tenía solo 17 años cuando la celebración de Año Nuevo se convirtió en desesperación y angustia.

Cuenta que se encontraba con amigos, en La Aurora al nivel de La Joya, encendiendo pirotecnia, pelando la mecha del explosivo para tener más tiempo para alejarse. Pasaron 10 minutos y el artefacto parecía haberse apagado. Él se acercó con el objetivo de lanzarlo a un charco de agua que se encontraba a un lado; sin embargo, a los segundos de levantarlo y tirarlo, explotó a pocos centímetros de su mano derecha, la cuál quedo con los huesos expuestos de tres dedos.

Ante esta situación, comenta que se quedó en 'shock' durante unos 20 segundos, momento en el que comenzó a brotarle sangre en gran cantidad. Los vecinos actuaron con rapidez y lo llevaron al hospital más cercano, donde lo recibieron 'pálido' por haber perdido al menos dos litros de sangre y que según el doctor casi muere desangrado.

Aunque la lesión principal fue en la mano, sus oídos también fueron afectados, quedándose sordo unos segundos después de la explosión.

A pesar del infortunio que sufrió, sentía que había arruinado las fiestas para su familia, en especial para su papá, quien gastaba una gran cantidad de dinero en explosivos y pirotecnia para los monigotes y la bienvenida al siguiente año. No obstante, el papá, al contemplar la situación en la que su hijo se encontraba, le pidió perdón y lloró por gastar el dinero de manera absurda.

"Mi recuperación fue lenta y algo dolorosa", indica Guevara recordando el infortunio por el que tuvo que pasar. Pasó por rehabilitación y visitas constantes a con un pediatra familiar. También explica el trauma que le provocó la situación, por lo cual durante unos cinco años temblaba y lloraba como reacción ante los petardos que encendían cerca de su casa, aunque quería mostrarse fuerte ante los demás.

Culminó con un corto consejo para todas las personas que manipulan estos artefactos: "El dinero mal invertido siempre genera malas ganancias, y en este caso, accidentes que, por suerte, el amor de mi familia y amigos no hizo que fueran fatales".

En este escenario, la precaución con estos materiales es crucial para disfrutar de las fiestas con calma y seguridad. Casos como el de Guevara son recurrentes durante estas fechas, y por tal razón, se necesita crear conciencia en la población.

Por ende la Secretaria de Gestión de Riesgos presenta algunas recomendaciones para disfrutar con seguridad las fiestas:

Recomendaciones para usar la pirotecnia con seguridad

• Los niños nunca deben manipular pirotecnia
• Si el encendido falla inutiliza el artificio con abundante agua.
• No enciendas material cerca de tanques de gas u otros objetos inflamables.
• Jamás detones ni enciendas los juegos pirotécnicos si presentan desperfectos o alteraciones.
• No dejar los artículos al sol o próximos a fuentes de calor.
• Nunca apunte o lance fuegos artificiales a otra persona.
• Nunca lleve fuegos artificiales en un bolsillo.

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