Para Olimpia Coyago solo queda luchar para que los pocos ejemplares de truchas se salven, pues la inversión para su negocio de pesca deportiva es grande y lo ha perdido casi todo. Su emprendimiento se ubica cerca de la orilla del río Guachalá, barrio La Josefina, en el cantón Cayambe, ubicado al norte de Quito. El afluente se desbordó y se ‘llevó’ el área de juegos.

(Te puede interesar: En Quito también se convive con okupas)

“No he querido ni comer solo de pensar cómo me voy a levantar esta vez”, dice llorando. Hace 23 años pasó algo parecido y en esa ocasión perdió su casa. “Hice préstamos, logré salir adelante por mis hijos. Ahora no sé qué hacer”, agrega.

No fue la única, la zona se caracteriza por este tipo de oferta turística, por lo que al menos dos vecinos más tuvieron afectaciones. “Las piscinas de las truchas se llenaron de lodo y se murió la mayoría. El paso de agua quedó lleno de lodo”, lamenta la mujer.

Es por eso que optó por contratar maquinaria privada para tratar de rehabilitar la toma de agua y con ello salvar a sus “animalitos”.

El sargento Diego Puga, comandante del Cuerpo de Bomberos de Pedro Moncayo, explica que se presentaron lluvias en la parte alta. Es decir donde nacen los ríos Pisque y Guachalá. Ambos salen del nevado Cayambe. “Este tipo de emergencias se suscita cuando las precipitaciones son por allá. En la parte baja no hubo mucha presencia de lluvia”, explica.

El desbordamiento del río Pisque afectó a otro centro turístico ubicado en Guayllabamba, aunque es jurisdicción compartida con Pedro Moncayo. Javier Fernández, gerente del sitio, relata a EXTRA que el hecho se registró a las 10:00 del domingo. “Nos dimos cuenta de la creciente y evacuamos a todos los turistas que estaban ya en las instalaciones. El río creció mucho y muy rápido”, recuerda.

Aunque no hubo personas heridas, las pérdidas económicas son cuantiosas, pues se perdieron reservas. Además, el río se ‘llevó’ el 25 % de la infraestructura del lobby, así como varios detalles ornamentales. “Las piscinas quedaron contaminadas por el lodo”, explica.

Fernández acota que los daños los asumirá el seguro, aunque no es la situación de Olimpia, quien dice que los ahorros que tenía se ‘van’ en sus intentos de salvar a sus truchas.

La carretera que une a La Josefina con Guachalá también sufrió daños, pues un buen tramo se desmoronó y con ello varios postes de luz. Algunos miembros del Emel Norte, empresa que provee el servicio, llegaron para realizar las reparaciones. “No se podrá restablecer la energía para todos.

La Secretaría de Seguridad del Municipio de Quito informó que se activaron los equipos de respuesta: Cuerpo de Bomberos de Quito, Administración Zonal Eugenio Espejo y Policía Nacional.

Además, se solicitó apoyo de la Dirección de Gestión de Riesgos y del Consejo Provincial de Pichincha para la evaluación del puente. En el sitio también colaboró personal de Policía Nacional, que mediante el escuadrón de carreteras realiza constantes inspecciones en la vía.

También personal del COE Metropolitano realizó un sobrevuelo de evaluación con dron en el que se pudo observar un movimiento en masa que expone una vía de tercer orden al margen izquierdo del río, vía a cargo del Gobierno de la provincia de Pichincha. Adicionalmente se visualizó las afectaciones al margen derecho del río. No hay viviendas expuestas a esta amenaza.

¿Quieres leer más contenido de calidad sin límites? ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!