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Mujer atropellada en una estación de Quito murió el día que cumplía años
Sus restos serán enterrados en Tumbaco. El conductor escapó luego del accidente.
Marcia Cando no le pidió a su esposo que la llevara al trabajo. Decidió ir sola la mañana de este martes 26 de enero del 2021. Tampoco llevó su celular. A las 05:27 la atropelló un bus, en la estación Río Coca, al norte de la capital.
05:40. Jorge Valencia, su esposo, recibió una llamada a las de los bomberos. “Su señora ha tenido un accidente. Lo atropelló un carro”, le dijeron. El hombre no lo creía porque hace menos de una hora se despidió de su pareja. Incluso le dijo que por la tarde pasaría por ella para regresar juntos a su casa en Tumbaco.
Valencia preguntó por el conductor y el uniformado le habría respondido que están investigando el hecho. Antes que le hiciera otra pregunta, el bombero sentenció: “…pero lamento decirle que su esposa falleció”.
El señor, de origen colombiano, pensó que era una broma porque ayer festejaron junto a sus hijos el cumpleaños número 50 de Cando. Luego fue en su motocicleta hasta la estación y vio el cadáver de su esposa en el piso.
Vio a los policías del Servicio de Investigación de Accidentes de Tránsito (SIAT) recogiendo evidencias. Su esposa estaba boca abajo. A lo lejos observó que tenía heridas en la cabeza. “Creo que el bus le paso por encima”.
Las autoridades le dijeron que el conductor se había fugado con el vehículo. Valencia pidió justicia. Luego fue a la morgue, junto a sus familiares, para retirar los restos de la mujer. Ellos dijeron que la enterrarán en Tumbaco.
La Empresa Pública Metropolitana de transporte de Pasajeros de Quito indicó, mediante un comunicado que se brindará “toda la información requerida por las autoridades correspondientes para las investigaciones respectivas”.
Valencia dijo que también se asesorará de un abogado y un familiar para seguir el proceso legal. “No sabe cuánto la quería. Era una gran mujer”, dijo mientras se resistía a llorar.
Cando trabajaba en una panadería ubicada en el norte de Quito. Deja en la orfandad a tres hijos.