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Jorge Yunda: “Mi rol es defender mis derechos”
Una medida cautelar suspendió su proceso de remoción. Salta en ‘chulla pata’ y dice que llegó al cargo por su ‘pipol’. Que de allí nadie lo mueve
La situación del alcalde de Quito, Jorge Yunda, todavía tambalea. Cuando estaba a punto de ser ‘despachado’ del Municipio, las medidas cautelares que le otorgó un juez lo blindaron nuevamente y se suspendió su remoción, que ya había sido ratificada por el Tribunal Contencioso Electoral. A EXTRA le dijo que no se aferra al cargo.
Abogados constitucionalistas han dicho que es improcedente esta medida cautelar.
No soy abogado ni experto, pero mi defensa me ha explicado que han atropellado mis derechos en una mesa de remoción, donde el juzgador es el principal beneficiario de mi salida, el señor vicealcalde (Santiago Guarderas). Es un proceso viciado.
Pero el Tribunal Contencioso Electoral lo ratificó...
La primera acción de protección evidencia que no gocé de imparcialidad, derecho fundamental de cada ser humano.
Usted ha dicho que el odio es como tomar veneno y esperar que el otro se muera. ¿Se pone en un rol de víctima?
Estoy en el rol de defender mis derechos. Muchos dirán que me estoy aferrando a un cargo, un cargo que me gané en las urnas.
Encuestadoras revelan que su aceptación es baja.
Ninguna encuestadora vaticinó que yo iba a ganar las elecciones. Yo tengo las encuestas de carne y hueso. Yo voy a las parroquias sin seguridad y hasta ahora no me han lanzado ni un tomate ni un huevo.
¿Intentar quedarse en la Alcaldía significa blindarse de la cárcel por el proceso de peculado que le investigan?
El alcalde (que usa grillete) no está acusado de sobornos ni de sobreprecios ni de coimas o diezmos. No está acusado de enriquecimiento ilícito.
¿Cómo gobernar la capital con la mayoría del Concejo Metropolitano en contra?
Yo entré con tres concejales, nunca tuve mayoría. Uno de ellos fue el vicealcalde, que entró de mi mano, comió de mi mano. Te jura lealtad para que luego se reúnan y se ofrezcan empresas y administraciones zonales.
Si es removido del cargo, ¿usted se quedará en el país o se irá como su hijo Sebastián?
Yo respondo por mis actos, yo me quedo en mi país. Tengo una empresa de 35 años, volveré a mis actividades anteriores. Desde ahí seguiré litigando en instancias internacionales.