Fue una madrugada de angustia y terror para 14 familias que residen en el sector El Chorrillo, en la cooperativa San Francisco, en el noroeste de Guayaquil, un incendio de magnitud 3 consumió una fábrica se pallets y estuvo a punto de contaminar sus viviendas.

Para apagar las llamas al lugar llegaron más 150 socorristas y 20 vehículos del Cuerpo de Bomberos de Guayaquil, entre camiones cisternas y ambulancias.

El mayor Julio Jalón, jefe de la sexta brigada del Cuerpo de Bomberos explicó que el mayor riesgo era que las viviendas que están alrededor de la fábrica pudieran contaminarse con las llamas y que por eso actuaron de manera inmediata y con un fuerte contingente de personal y de vehículos.

"La prioridad era proteger las casas. Hay un pequeño canal de agua que separa el depósito de las viviendas, pero la radiación era fuerte. Ya tenemos controladas las llamas, pero el viento puede reavivar el fuego", manifestó.

Para precautelar sus vidas las casi 100 personas que habitan en las casas más cercanas al lugar del incendio salieron de sus inmuebles y se pusieron a buen recaudo.

"Esto era un infierno, las paredes de las casas quemaban. El humo contaminó todo el lugar", expresó Magdalena Quimí, residente de esta zona porteña.

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