Así como crecieron las aguas del río Chanchán, así incrementa la preocupación de las personas que habitan en las riberas del afluente de la parroquia Huigra, en el cantón Alausí, provincia del Chimborazo.

Un ejemplo de ello es el caso de doña María Castro, quien no es nacida en la parroquia, pero reside en ella desde hace veinte años. La adulta mayor sostiene que parte de su patio se fue con el río, por eso perdió a sus cuyes, con sus respectivas jaulas. También se llevó a sus gallos, lo que alcanzó a salvar fue a sus dos chanchos.

Dentro de las pérdidas que contabiliza también está un tanque de agua, un baño, varias herramientas, ollas y pailas. Según la mujer, el perjuicio asciende a unos 5 mil dólares. Sin contar que, de crecer nuevamente el afluente, podría llevarse la edificación, propiedad de su hija.

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“Recién se construyó un segundo piso y se invirtió $ 5.000”. Actualmente, María y su familia no duermen en el inmueble, solo atienden su tienda. Hoy se quedan en casa de su consuegra. De venirse abajo su vivienda, María sostiene que la pérdida sería unos 15.000 dólares, aproximadamente.

Leonardo Gómez, de 72 años, morador, dice que la afectación del pasado 28 de mayo se debió a la creciente del río. “La corriente con piedras vino con tal fuerza que prácticamente se ‘comió’ las bases de algunas estructuras, una de ellas fue una cancha de vóley y un mercado”, expresó.

Los lugareños ya fueron evacuados y según Freddy Segarra, presidente de la Junta Parroquial de Huigra, el caudal ha reducido, pero este derribó muros, puentes peatonales y en la parte trasera de algunas viviendas, el agua habría ingresado.

“Lo que se requiere es encauzar el río para que no haga más daño de lo que ya está. Hay que tratar de salvar las viviendas, parte del tramo de la vía E37. Las zonas más afectadas son Las Violetas, barrio turístico, el centro del pueblo. Es más, si acá se cae un muro, se irían unas 30 casas”, manifestó Segarra, quien asevera que si el afluente aumenta la cantidad de sus aguas, podría arrasar con las casas de sus riberas.

La Comisión Parroquial para Emergencias (COPAE) de Huigra resolvió varios puntos, tales como: Exhortar a la ciudadanía, no realizar actividades turísticas ni grabaciones en las orillas del río Chanchán. Socializar con la comunidad el plan de evacuación frente a inundaciones. Solicitar a Policía Nacional, realizar el patrullaje nocturno para evitar posibles hurtos en las zonas evacuadas.

De igual manera, se trasladó la feria libre de los días sábados y actividades comerciales que se realizaban en las canchas de vóley a la plaza 24 de mayo con el objetivo de precautelar la integridad física de las personas.

El paso vehicular por la panamericana E47 en el tramo que atraviesa la parroquia Huigra, únicamente se permite para vehículos livianos en el horario establecido de 6:00 a.m. a 19:00 p.m.

- 16 familias afectadas (70 personas aproximadamente), de las cuales 8 familias (32 personas) son afectadas en cultivos y animales.

- 16 viviendas afectadas aproximadamente

- 3 bienes públicos destruidos (poste de la red eléctrica, puente peatonal, gradas)

- 3 bienes públicos afectados (muros de hormigón - piedras, cancha de vóley, plaza de feria)

- 1 vía de segundo orden parcialmente afectada

- 1 bien privado afectado

- 6 familias evacuadas (57 personas)

- 6 familias en alojamiento temporal (57 personas)

- 3 hectáreas de cultivos afectados

- 2 hectáreas de cultivos destruidos

- 12 animales afectados

- 1.000 animales muertos

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