Que hay que “sincerar el precio de los combustibles” de una vez por todas, pues su situación económica escada vez más insostenible, es la postura del gremio de gasolineros de la provincia del Guayas, sobre la pretensión del Gobierno de liberar el valor de las gasolinas Extra y Ecopaís.

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Iván Casanova, presidente de la Cámara de Distribuidores de Combustibles del Litoral, explicó que son más de 50 años los que ha durado un subsidio que los ‘estrangula’ financieramente, pues el margen de ganancias de $ 0,21 que tienen desde 2019 por la restricción en los precios no les permite ni siquiera cubrir los costos operativos.

Casanova detalló que hay alrededor de 1.200 gasolineras a nivel nacional, de las cuales 269 están en Guayas y que solo en Guayaquil hay unas 110 estaciones.

También consideró que se debe eliminar una de las dos gasolinas subsidiadas, pues si se liberan los precios las dos tendrían un valor diferenciado, lo cual generaría contrabando interno, según lo expresado por el ministro de Energía, Roberto Luque.

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José Garzón, representante de los gasolineros rurales, añadió que su situación es aún más precaria, pues para cargar combustible deben ir a las ciudades y luego viajar grandes distancias para abastecer las bombas.

“Las gasolineras de la provincia del Napo se abastecen en Quito; las del Puyo, en Ambato; las de Loja y El Oro cargan en La Troncal (Cañar), a más de 200 kilómetros”, y que con el actual margen de ganancias “una gasolinera rural que vende menos de 60.000 galones al mes está quebrada”, concluyó.

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