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Activistas y familiares del equipo periodístico asesinado pidieron justicia.EFE

Familiares de periodistas asesinados están insatisfechos con sentencia

Los deudos de Javier Ortega, Paúl Rivas y Efraín Segarra aseguraron que la investigación careció de profundidad

Los familiares del equipo periodístico ecuatoriano secuestrado y asesinado en 2018 a manos de una disidencia de las FARC, consideraron este martes que la sentencia en Colombia contra uno de los integrantes del grupo criminal organizado refleja la falta de una "investigación seria" sobre el caso.

Un juez colombiano condenó a 28 años y ocho meses de prisión al disidente de las FARC Jesús Vargas Cuajiboy, alias "Reinel", por el secuestro y asesinato de los tres miembros del equipo del diario ecuatoriano El Comercio en una zona de la frontera común.

"Para las víctimas y sus representantes, lo ocurrido a lo largo del proceso y la sentencia deja en evidencia la falta de una investigación seria y exhaustiva por parte de la Fiscalía General de la Nación", reza un comunicado emitido hoy por la plataforma #Nosfaltan3 y la Fundación para la Libertad de Prensa (FLIP).

Aunque el documento considera que "el fallo es relevante", cuestiona la actuación de la Fiscalía colombiana a la que achaca el no haber sido "diligente en su investigación", así como que "tampoco ha logrado esclarecer responsabilidades en otros niveles, ni dado a conocer los autores materiales ni intelectuales del secuestro y posterior asesinato".

Las víctimas consideran que "no se ha hecho justicia y este fallo de ninguna manera representa que la labor de investigación de los estados, en especial de Colombia, haya concluido".

El delegado contra la Criminalidad Organizada de la Fiscalía colombiana, Javier García, aseguró hoy que "el abundante material de prueba" que recaudó la institución permitió establecer que Vargas fue "el encargado de custodiar a las víctimas durante la retención y tuvo conocimiento" de la orden del asesinato.

"Ante la contundencia de los elementos materiales obtenidos, alias 'Reinel' aceptó su responsabilidad en los hechos y mediante preacuerdo fue sentenciado por el Juzgado Primero Penal del Circuito Especializado de Tumaco por los delitos de concierto para delinquir agravado, secuestro extorsivo agravado y homicidio agravado", dijo.

Es la primera condena relativa al crimen del equipo periodístico, cuyo secuestro se conoció el 26 de marzo de 2018.

Las víctimas fueron el periodista Javier Ortega, el fotógrafo Paúl Rivas y el conductor Efraín Segarra, que acudieron a la zona de frontera con Colombia para realizar coberturas sobre el auge de la violencia en el sector.

Sus cuerpos fueron encontrados en abril de ese año en un área remota del municipio colombiano de Tumaco, fronterizo con Ecuador, asesinato atribuido a una disidencia de las FARC conocida como Frente Oliver Sinisterra.

CONDENA SOLO UNA PIEZA DEL ROMPECABEZAS

La plataforma que representa a los familiares recordó hoy que según un informe elaborado por el equipo de seguimiento especial de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), aún siguen existiendo hipótesis que no han sido investigadas, y que no se ha garantizado una reparación integral a las víctimas.

"Casi tres años después, la Fiscalía aún no tiene claro cuál fue el papel que desempeñaron las tres personas que se encuentran acusadas y siguen sin aclararse las condiciones en que se dio el homicidio", censura el comunicado.

Y recalca que "se han omitido aspectos que comprometerían la responsabilidad del Estado colombiano" en el fatal desenlace.

Arguyen además que durante el cautiverio se llevaron a cabo negociaciones con Walter Patricio Arízala Vernaza, alias "Guacho", cabecilla de la disidencia, y que el Estado colombiano era conocedor de estas y aún así lanzó acciones militares en la zona donde presumiblemente se encontraban los capturados, frustrando la posibilidad de que fueran liberados.