Exclusivo
Actualidad
¡Le ‘clavaron’ un diente ‘fuchi’!
A una niña de 10 años le extrajeron una pieza que no era. Cuando se dieron cuenta, según su papá, la sacaron de la basura y se la colocaron otra vez.
Arely teme reír. Lo hace con disimulo y sin expresar libremente su alegría, como cualquier niña de 10 años. A ella le extrajeron un diente equivocado y se lo colocaron nuevamente tras sacarlo de la basura... ¡insólito!
Pregunta a sus padres si nunca más podrá esbozar una amplia sonrisa. Si sus facciones se van a deformar cuando crezca. “Le ha afectado psicológicamente y se acompleja”, dice Geovanny, su padre.
El 14 de junio de 2019, según el progenitor, la pequeña tenía cita con un cirujano maxilofacial del Hospital Baca Ortiz de Quito. Este debía extraerle un diente supernumerario, condición llamada hiperdoncia o desarrollo de dientes extras. Pero nada salió bien.
En principio, el médico asignado no estuvo, por lo que otra doctora atendió a la menor. “Hasta me tuve que salir porque maltrató a mi hija. Por falta de dinero a veces uno aguanta esas cosas”, lamenta Geovanny. La pequeña se había puesto nerviosa al ver el instrumental odontológico y ante la idea de que le tenían que abrir la encía.
DEL TACHO
Después de varios minutos de ‘forcejear’ con el diente, se lo extrajeron. Enseguida llevaron a Arely a la sala de radiología para verificar el estado de su dentadura.
Cuando volvió, la doctora le dijo a Geovanny que hubo un error. “Me he equivocado. Le he sacado un diente que no era. Estas cosas pasan”, rememora las palabras de la médica.
Regresó a la sala de operaciones, pero los padres no podían creer que la odontóloga preguntara dónde estaba la pieza dental que le había sacado.
Según Geovanny, la médica sacó el diente de los desperdicios, lo limpió y le volvió a meter en su encía. Ante el asombro de los padres habría respondido que “las piezas duran 24 horas fuera del cuerpo”.
El procedimiento continuó y le extrajeron el diente que en principio debía ser retirado.
Arely quedó así. Requiere de un largo tratamiento para mejorar su sonrisa.
“La hice revisar, pero hay que hacerle otra cirugía y un tratamiento que sería hasta que cumpla al menos 18 años. Sino hasta su carita se puede desfigurar”, agrega el padre.
DENUNCIA
Un funcionario de la casa de salud le habría contado a Geovanny que quien realizó el procedimiento era una practicante de cirugía. “Recién entrenándose en esa especialidad”, manifiesta Geovanny.
Entonces reclamó y los médicos intentaron calmarlo. “De gana va a hacer problema, si estas cosas pasan”, le dijeron.
Ese mismo 14 de junio los padres de Arely colocaron una denuncia en la Fiscalía, pero desde esa fecha no ha habido ninguna diligencia. El diente muerto sigue en su boca. Necesita de cuidados especiales y de medicamentos cada vez que se inflama su encía.
“Tampoco podemos hacerle el tratamiento porque esa es la evidencia que queremos que vea la Fiscalía y todavía no la revisan”, señaló el papá.
EXTRA envió un correo al Ministerio de Salud Pública, institución encargada del manejo del Hospital Baca Ortiz, el 24 de febrero, para pedir la versión de los responsables. Sin embargo, hasta el cierre de esta edición no han respondido.