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Enigmas: ¡Perro del demonio!
Un trabajador de una bananera sufrió un accidente en moto en la vía La Primavera, ubicada en El Oro. Dos veces se ha topado con un supuesto humanoide
Desde su infancia, Roberto asegura haber sido "dulce" para los hechos paranormales. Dice haber experimentado la presencia de espectros, movimiento de objetos, y un extraño encendido y apagado de luces en su dormitorio. Todo lo que haría saltar del susto a cualquiera, le ha pasado a él, por lo que creía que a su edad madura, ya estaba curado de espantos. Sin embargo, nada se compara a lo que vivió hace 13 años, cuando regresaba a su casa: toparse con un perro diabólico.
Ocurrió en 2008. Roberto tenía 55 años y trabajaba en una bananera, en el sector de la parroquia La Iberia, cantón El Guabo, provincia de El Oro. Según las creencias de los lugareños, por las carreteras de ese lugar rondan supuestos espectros que atormentan a los viajeros.
Un encuentro inesperado
Eran aproximadamente las 04:00 de un día cualquiera, cuando este trabajador había terminado sus labores y tomó su moto para regresar a su “caleta”, ubicada en Machala. El viaje duraba unos 30 minutos por la vía La Primavera. Iba solo en medio de la oscuridad hasta que un enorme can negro se le atravesó en el camino.
“Era más grande que mi moto. Después de impactarme con el perro, yo caí al piso y él quedó parado como si nada. En sus ojos tenía llamas, fuego... luego me desmayé”, rememora Roberto.
También recuerda que ese día había tenido una discusión con su esposa y volvía a su casa con la intención de continuar con la pelea.
Tras el accidente su motocicleta quedó destrozada, como si se hubiera estrellado contra una pared o un vehículo pesado. Él permaneció en estado de coma durante una semana.
Por un momento le atribuyó esa experiencia a una alucinación, producto del cansancio por el trabajo, también por conducir en la madrugada. Sin embargo, aproximadamente seis meses después volvió a vivir la misma escena terrorífica.
Aparece y desaparece
“Es de no creer. A partir del primer accidente, manejaba despacio. Una madrugada regresaba a mi casa y nuevamente se me apareció el mismo perro. Esta vez tiré la moto al piso para derrapar y no impactarme con el perro, que de la nada se desvaneció. Eso lo vio un camionero que venía atrás mío”.
Luego de esto, Roberto no ha vuelto a toparse con el “perro del diablo”, como ha dado en llamarle. Probablemente las cosas en su hogar hoy marchen de mejor manera...
Un ángel satánico
Rafaela Álvarez, investigadora de hechos paranormales, explica que el supuesto "perro diabólico" podría ser un ángel satánico, del sombrerero negro o un ser humanoide, entidades que se acercan a las personas para alimentarse de sus malas emociones.
“El llevar una vida con problemas, de malos pensamientos, hace que los espectros se acerquen para alimentarse de las emociones. En este caso se trata de un ser demoniaco que puede transformarse en perro. Lo pudo sentir porque tenía las malas intenciones de pelear con alguien y esas emociones son un banquete para los espectros”, explica Álvarez.