“Busquen ayuda, sí se puede salir de ese círculo malévolo, aunque parezca imposible”. Trinidad tiene solo 15 años, pero ha sufrido lo suficiente como para no volver a caer en los engaños de las mafias de la prostitución.

La adolescente, de 15 años, salió de su hogar en la provincia de Los Ríos y cruzó la frontera con Perú hasta llegar a la ciudad de Chiclayo. Le prometieron un trabajo para mejorar sus condiciones de vida y ayudar a su familia. Pura ilusión.

Según la publicación del diario peruano La República, la compatriota llegó a Lambayeque a través de su ‘amigo’ José Quispe Molina, quien le prometió pasajes, hotel y un empleo. Nada de esto fue verdad, y con la presión de esa deuda y la necesidad de enviar dinero a casa, “acepté un trabajo en el local ‘El Nené del Norte’ para ganar algo”.

La menor de edad arribó a territorio sureño -no precisa fecha- utilizando una cédula de identidad falsificada. “Vivía atrapada por unas cadenas invisibles”, mencionó Trinidad, quien fue rescatada por agentes de la Dirección Contra la Trata de Personas y Tráfico Ilícito de Migrantes (Dirctptim), junto con otras 23 mujeres ecuatorianas adultas, 22 peruanas, 10 venezolanas y una colombiana.

El general Policía Nacional de Perú (PNP), Ulises Guillén, de enero al 13 de abril, ha realizado 15 operativos contra la trata de personas y 17 contra el proxenetismo. Han sido detenidas 29 personas, entre ellas 7 extranjeras. Asimismo, fueron rescatadas 345 mujeres: 134 peruanas y 207 extranjeras, además de 14 menores de edad.

Pagas ‘cupo’ o mueres

Rosmery Talía González Bermeo, ecuatoriana de 26 años, no corrió con la misma suerte de Trinidad, pues ella fue asesinada a balazos por un sicario que la persiguió por varias calles del distrito Villa El Salvador, en Lima. El ataque fue registrado por las cámaras de seguridad y se pudo observar cómo la joven fue ultimada delante de transeúntes y comerciantes.

La víctima, originaria de Mata de Cacao, localidad perteneciente a Los Ríos, según la policía peruana, se dedicaba a la prostitución.

El general PNP José Zapata, jefe de la Región Policial Lima, informó que a los delincuentes se les incautó dos pistolas, un fusil y tres motos. Los detenidos integrarían la mafia de ‘Los Sicarios de Valencia’, quienes se dedicarían a la extorsión de sexoservidoras en la zona de Lima Sur.

Rosmery deja huérfano a un pequeño de 6 años y, según investiga la Policía, se negaba a pagar los cupos que la banda criminal le exigía para poder “trabajar tranquilamente” en la zona que había elegido en Villa El Salvador.

La joven era amiga de la venezolana Siulka de la Rosa Suárez Mijares (20), quien fue asesinada a balazos en abril por la misma banda.