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Veeduría del Metro de Quito denuncia inconsistencias
El modelo de gestión sigue en entredicho, quienes vigilan la obra temen incluso por la vida de los usuarios si el Municipio es quien opera los trenes
En la Comisión Veedora del Metro de Quito, del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social, temen que en la ciudad ocurra una desgracia si la operación de este sistema de transporte se la hace por gestión directa. Es decir, que para el ente -que se encarga de vigilar el proceso de adjudicación de la operación del Metro-, una empresa internacional y con experiencia debería hacerse cargo del manejo del Metro.
“¿Usted se subiría a un avión con un piloto que no ha hecho vuelos previos?”, afirmó David Dávalos, coordinador de la veeduría. Por eso, después de revisar los documentos entregados por la Empresa Metropolitana del Metro de Quito, los veedores no se presentaron a la mesa de Comisión Técnica el miércoles pasado, la cual se encarga de la adjudicación.
INCONSISTENCIAS
Además de este inconveniente, la veeduría ha hallado varias cosas que no concuerdan, por ejemplo, el monto para el prefuncionamiento. “Subió de 158 millones a 208 millones de dólares y dijeron que era porque no se tomaron en cuenta los seguros”, agregó Dávalos.
El concejal Bernardo Abad, quien solicitó esta vigilancia, comentó que otra de las inconsistencias es el aumento de trabajadores en la empresa, “en una etapa en la que ya deben disminuir”, insistió.
INCONFORMIDAD DE LA GENTE
Todos estos inconvenientes se dan en medio de la incertidumbre de los ciudadanos que esperaban que este año ya funcionara este sistema de transporte. “Se podría entender que haya retraso por la pandemia, pero ya es hora de que podamos usar los trenes”, opinó Humberto Narváez, un conductor capitalino.
Para esta comisión también es preocupante el avance de la obra, pues el Municipio anuncia que ya está en el 99 % y se han realizado entregas de obras, pero solo se trataría de la infraestructura de las paradas. “Son trece subsistemas, no solo uno”, insistió Dávalos.