Una zarigüeya robusta, en perfecto estado y con 1,7 kilogramos fue la 'sorpresa' que recibió la Unidad de Protección del Medio Ambiente (UPMA), de la Policía Nacional, en la tarde del miércoles 21 de febrero al realizar un rescate en una unidad educativa en la ciudadela Abel Gilbert 3, en Durán.

El hallazgo de ese y otro ejemplar de la misma especie lo realizó el director de la escuela mientras ordenaban los útiles escolares al momento en el que se preparaban para una minga en los salones de clases. Inmediatamente, el directivo se comunicó con el servicio de emergencias ECU-911 para recibir ayuda.

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"Nos avisaron y estuvimos enseguida. El animal estaba escondido escapando de las zonas húmedas, por las lluvias recurrentes. No estaba agresivo, por lo que fue fácil sacarlo de ese espacio", reveló el uniformado.

Huilca asegura que en esta época del año, en la que se atraviesa la temporada invernal, es común que estos marsupiales ingresen a los hogares en busca de un lugar en el que encuentren abrigo y comodidad. "Se las ve más en invierno porque huyen de la humedad, por esa razón buscaron refugio en esa escuela", dice.

Él asegura que las residencias que se encuentran en zonas cercanas a mucha vegetación son las más propensas a 'recibir' estos 'invitados; sin embargo, estas podrían estar en sectores más alejados también. "Nos acaban de avisar de una zarigüeya en el suburbio", comenta.

Lo primero que se debe conocer de ellas es que no son animales que podrían causar daño; es decir, no atacarán a los humanos.

Ellas, al verse amenazadas, reaccionarán "haciéndose las muertas", según dice el sargento. Gracias a esto, se podría continuar con el proceso de extracción del animal del hábitat que no es propio de ellas.

Luego, se debe intentar confinar al animal en una habitación que no tenga salida. "En estos casos, llamar enseguida al ECU-911 para que notifiquen a la unidad de rescate animal y, sobre todo, no estresarlas. Muchas personas llegan hasta a atacarlas con palos y matarlas", comenta.

Sin embargo, él recomienda esperar a las unidades especializadas para esta tarea y enfatiza que la desinformación podría llegar hasta a pena privativa de libertad. "Puede llegar a una pena de dos a seis meses de prisión según el artículo 249 del Código Orgánico Integral Penal", refiere.

Él también advierte sobre otras especies que podrían ser avistadas en hogares. "Las boas constrictor suelen ser vistas en esta época. Ellas, al ser su alimento los roedores, salen a buscar estos animales que abandonan su hábitat usual debido a las lluvias".

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