Si nos ponemos a ‘tirar números’, la pareja protagonista del momento tuvo que haber gastado mínimo 6,80 dólares para llevar a cabo la escena que los hizo conocidos en el transporte aerosuspendido que une a Guayaquil y Durán en cuestión de un cuarto de hora.

La tarjeta, que solo funciona para el portador de la misma, cuesta 2 dólares. Ese rubro se suma al valor del pasaje que, en ida y vuelta, da 1,40. Es decir, los 3,40 dólares al multiplicarlos por los dos pasajeros se transforman en 6,80, que coincide con el valor mínimo que se paga en Guayaquil por una habitación en algunos moteles del centro, cerca de la estación Cuatro Mosqueteros.

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Andrés Wong, padre de familia de 32 años, se la ‘saca’ y afirma que eso lo hicieron por vivir alguna fantasía que tenían en pareja. “Tal vez se enojaron por algo y esa fue la forma de disculparse el uno con el otro. El que pedía disculpas cedió y no imaginaron las consecuencias”, dice.

Susy Morán, comerciante informal, comparte la hipótesis de Andrés y añade que “definitivamente lo económico no representó impedimento para ellos”. Es decir, no necesitaban la cama de un motel.

“Lo hicieron por la experiencia, porque hay gente que se queja de que no puede pagar la tarjeta, ya que ese dinero les sirve hasta para comprar un almuerzo, pero ellos compraron dos”. Ella relata que incluso ha visto a turistas quejarse de esta norma de este sistema de transporte.

Sin embargo, “ellos estaban en su derecho porque pagaron por el servicio”, dice Óscar Arias. “No los dejaría hacer eso en mi taxi, pero es cosa de los operadores del sistema”.

El conductor, que lleva unos 12 años taxeando, recordó una experiencia similar: una pareja homosexual quiso usar de cama la parte trasera del carro y él les ‘paró el carro’. “Todo es con respeto. Si no querían que hicieran eso debieron haberlos parado desde que vieron las intenciones”.

El momento de placer que tuvo la pareja en la cabina 17 y que ahora es conocido por muchas personas debido a las redes sociales fue aprovechado por una conocida cadena de moteles para llamar la atención del público y atraer clientes. “Si hay muchas ganas y poco presupuesto siempre tienen disponibles las habitaciones desde $6,99”, escribieron en un comunicado con un tinte de picardía.

SE LE MULTIPLICARON LOS SEGUIDORES EN TIKTOK

En redes sociales, la ‘fama’ de la mujer que aparece en un video manteniendo relaciones sexuales en una cabina de la Aerovía se disparó. En una cuenta de TikTok que cientos de usuarios han vinculado con ella contaba con menos de 2.000 seguidores hasta la mañana del miércoles 12 de julio, cuando aún la grabación tenía pocas horas de haberse viralizado.

Sin embargo, la mañana de este jueves 13 de julio ya sumaba más de 30 mil y muchos usuarios seguían dándole un me gusta (like) a sus fotos o grabaciones, donde aparece con escasa ropa o bailando.

Estos son solo algunos de los comentarios, algunos desde el exterior, que se pueden leer y que hacen alusión a la grabación: “Falta el video de la Metrovía”, “Próximamente asambleísta”, “Yo quiero un tour contigo cuando vaya a Ecuador”, “Cuando vienes al teleférico de Madrid”, “Espero que se acuerde de los primeros seguidores cuando sea millonaria”, “Futura ministra de Turismo”.

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