Una reunión de amigos terminó con sangre, en el norte de Quito. La noche del domingo un grupo de individuos bebía en el local de una vecina y se formó una gresca entre dos de ellos.

Fernando Córdova y Francisco Cabezas se dieron un ‘round’ de unos cinco minutos. Rompieron botellas, mesas y casi agreden a la propietaria. El hecho se registró a las 19:00.

Luego de la bronca, Córdova se fue amenazando a su contrincante. A los cinco minutos volvió con un revólver y supuestamente le metió un ‘plomazo’ a Cabezas, de 29 años. Y luego huyó en un vehículo.

Los parientes y amigos de la víctima intentaron detener la hemorragia en su pecho hasta que llegara una ambulancia, pero aseguraron que nunca apareció. Lo subieron al carro de un ‘veci’ y lo llevaron al Hospital San Francisco, donde todavía se recupera de la herida de bala.

Captura del sospechoso

La teniente Alison Galeano, jefa del circuito La Bota, y personal de la Dirección Nacional de Muertes Violentas (Dinased), hablaron con los testigos del ataque para que les dieran información sobre el ‘pistolero’ y así dar con su ubicación, pero no quisieron hablar.

Los moradores les dijeron a los oficiales que no podían dar nombres ni direcciones porque el responsable era conocido en el sector y tenía problemas con la justicia. La teniente y sus compañeros realizaron un operativo por la zona e intentaron conseguir las grabaciones de las cámaras para cerciorarse si registraron la huida.

En ese momento, una mujer que se identificó como hermana de la víctima se acercó desesperada y llorando a los agentes para suplicarles que llevaran preso al causante.

La mujer les dijo que luego de la gresca persiguió al responsable, quien se había fugado en un carro todoterreno hasta un domicilio ubicado en la intersección de las calles Diamante y Turmalina. “Se bajó y corrió a un departamento”, les contó a los policías.

Galeano se contactó con la propietaria del domicilio y le explicó lo que había ocurrido para que les dejara pasar. Córdova salió a recibirlos como si no hubiese pasado nada y lo apresaron.

Los agentes buscaron en el departamento para hallar el arma de fuego que habría utilizado el sospechoso, pero no hubo. Lo que sí encontraron fueron tres balas de diferente calibre, las mismas que fueron llevadas al departamento de Criminalística para cotejar si pertenecen a un arma relacionada con algún crimen.

Es un ficha

El detenido, de 32 años, fue llevado a la Unidad de Flagrancia para iniciar el proceso judicial en su contra por el delito de tentativa de asesinato. Le dieron prisión preventiva y será investigado por 30 días.

Además, según la Función Judicial, Córdova tiene casi una quincena de juicios en su contra desde el 2008. La mayoría de los casos es por el delito de robo, receptación, tráfico de drogas y tenencia de armas.