El nombre del grupo terrorista Los Choneros ha resonado con mayor fuerza en el Oriente ecuatoriano, específicamente en la provincia de Sucumbíos. Esto luego de que dos sujetos, uno de ellos considerado como un cabecilla de esta agrupación en la zona, fueron vinculados al crimen de un policía, ocurrido el 1 de junio de este año.

El 9 de diciembre de 2024, los criminales conocidos con los alias de Topo y Cubano fueron vinculados al proceso por el asesinato del agente Miguel Morejón, quien fue acribillado afuera de su casa cuando salía de la misma.

Luego del proceso investigativo, se determinó que ambos serían parte de los autores materiales que llegaron con fusiles para acabar con la vida del uniformado, a quien se lo había acusado de que supuestamente intimidó a un fiscal, según información de la Judicatura.

Sin embargo, en la audiencia de vinculación se determinó que Topo y Cubano fueran liberados con medidas sustitutivas. Ambos no podrán salir del país y deberán presentarse periódicamente en Fiscalía.

El liderazgo chonero en Orellana

Una fuente informativa que sigue el caso le confirmó a EXTRA que Topo tiene que cumplir con la medida en la Fiscalía de Joya de los Sachas, cantón perteneciente al cantón Orellana. Según el informante, este sujeto es líder de la agrupación Los Choneros en esta zona ahora considerada crítica por los crímenes que se han registrado durante este año.

Pero ¿quién es este sujeto? Según información judicial, Topo ha sido procesado por dos delitos en 2016 y 2017: secuestro extorsivo y asociación ilícita. Pero por ninguno ha recibido sentencia ni ha cumplido prisión.

Su compinche, en cambio, está siendo investigado por el crimen de un líder indígena llamado Eduardo Mendúa, hecho ocurrido el 26 de febrero de 2023. Sin embargo, solo un hombre ha sido condenado por este suceso que se registró en la zona conocida como Dureno, también en Sucumbíos, y en la que reside la nacionalidad cofán, a la que pertenecía Mendúa.

Los Choneros en la mira de exguerrilleros

La presencia del grupo Los Choneros en Orellana y ahora en Sucumbíos ha generado disputas con grupos terroristas colombianos como lo es Comandos de Frontera, conformado por guerrilleros desmovilizados de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

Estos sujetos fueron señalados por las autoridades de ser los autores de una matanza policial policial que se registró el 12 de agosto en Joya de los Sachas, Orellana. Tres agentes fueron asesinados por los colombianos cuando acudieron a una llamada de auxilio.

La comunicación daba cuenta que unos tipos fuertemente armados habían llegado a un inmueble con la intención de asesinar a quienes estaban adentro. Sin embargo, la presencia policial lo impidió y los gendarmes se convirtieron en las víctimas.

Cuando otros agentes llegaron a investigar al inmueble donde se iba a producir el crimen múltiple, encontraron a tres hombres identificados como Ángel Clemente Quiñónez Benítez, Julio Alejandro Rosado Moreira y Luis Antonio Zambrano Moreira, a los que se procesó por el delito de tenencia de armas. Según la Judicatura, estos tipos son integrantes de Los Choneros y con largos antecedentes penales.

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Implicación en otras muertes violentas

Los Choneros se han desplazado en ambas provincias con el fin de afianzar su poder con su presencia. Su nombre ha estado vinculado a otras actividades ilícitas como la minería ilegal, delito que ha dejado una estela de muertos mayormente en Orellana.

Aunque también han sido señalados en casos de extorsión y más asesinatos. Quiñónez Benítez, por ejemplo, fue detenido por el asesinato de un hombre en el malecón de El Coca, en Orellana, el 8 de agosto de 2024.

La noche de esa fecha, la víctima conocida como Pedro Llori fue abordada por un tipo armado con un fusil, quien le disparó sin piedad en la cabeza. Tras las indagaciones, Quinónez Benítez fue señalado como autor directo y quien forma parte de Los Choneros y que estaba libre desde que fue detenido por tenencia de armas tras la matanza policial.

Por ahora, los procesos continúan pero con el mal sabor de ‘boca’ que estas personas quedan libres solamente con medidas sustitutivas. Además, su máximo líder José Adolfo Macías Villamar, alias Fito, todavía sigue prófugo tras confirmarse su fuga de la cárcel regional de Guayaquil, el 7 de enero pasado.

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