Jaime Ariel Uquillas Cruz, alías Ñorqui, otro de los sospechosos en el asesinato del animador Efraín Alberto Ruales Ríos, fue detenido la tarde de ayer en Lomas de Sargentillo (Guayas). Esta información fue corroborada por el fiscal que investiga el caso, Víctor González, y también por la cuenta de Twitter del ministro de Gobierno, Patricio Pazmiño.

Sobre Uquillas, quien fue trasladado hasta la Policía Judicial, pesaba una orden de detención con fines investigativos emitida por un juez de la Unidad Penal del sur de Guayaquil.

Sin embargo, fue la versión que Alexis Paúl Casquete Villamar proporcionó a los investigadores la que condujo a uno de los detenidos por el crimen de Ruales. Él fue capturado el pasado 5 de febrero y fue procesado por el robo del vehículo del que le dispararon y asesinaron a Ruales el pasado 27 de enero en la avenida Guillermo Cubillos, en el norte de Guayaquil.

Casquete confesó que entre las personas que iban en el vehículo en el momento del asesinato del presentador Efraín Ruales, estaban alias Achiote y alias Alvarito.

Así consta en el acta de la audiencia de formulación de cargos en contra de Álvaro Bolívar Cagua Andrade, quien fue detenido diez horas antes mientras se encontraba en las inmediaciones de una gasolinera en el sector El Lagarto, del cantón Rioverde, en Esmeraldas.

Durante la diligencia judicial, que comenzó a las 21:35 del miércoles y concluyó 30 minutos después, en la Fiscalía de Flagrancia de La Valdivia, en el sur de Guayaquil, Cagua se acogió al derecho al silencio. Sobre Achiote, la Policía y la Fiscalía aún no se han pronunciado ni revelado su identidad.

Sin embargo, durante la audiencia en contra de Alvarito, el fiscal González presentó los elementos de convicción y las pericias, entre ellas el arma de fuego 9 milímetros que se habría utilizado para el asesinato y que fue hallada la mañana del martes a orillas del estero Salado, en el sur porteño.

En la audiencia, el juez Iván Tircio acogió el pedido de la Fiscalía y dictó prisión preventiva en contra del sospechoso, que será investigado por asesinato. La instrucción fiscal durará 90 días.

En el documento judicial consta que la Fiscalía presentó como elemento de convicción la vaina que se encontró en la escena de los hechos. Y al cotejarla, se corroboró que pertenece a la pistola que fue hallada en el estero.

También se indica que “de acuerdo con los elementos de convicción se identificó a Alvarito como la persona que realizó los disparos al vehículo en el cual fallece Efraín Ruales”. Al término de la audiencia, Cagua fue trasladado al Centro de Privación de Libertad Guayas N.º 1, también conocida como Penitenciaría del Litoral.

Entrenado para matar

En la página de la Función Judicial también consta que Cagua está relacionado con un asesinato al estilo sicariato ocurrido en 2017, pero quedó en libertad al no ser comprobada su participación en ese hecho.

Este Diario consultó con el fiscal González para conocer si por este antecedente Alvarito sería un asesino a sueldo. Explicó que no se puede probar si es un sicario, porque habría que buscar a quienes le pagaron por el crimen, pero lo que sí se puede determinar es que se trató de un asesinato.

EXTRA también le consultó a Ángel Zapata, excoronel de la Policía, si alias Alvarito tiene el perfil de un sicario. Este dijo que para dispararle a un vehículo en movimiento y acertar se requiere conocimiento y tener sangre fría.

“Él (Cagua) tiene antecedentes y por la forma en que se realizó el hecho criminal, es evidente que tiene entrenamiento para matar (...) y se requiere una logística, como vehículos, armas, tecnología e información”, explicó Zapata.

El oficial en servicio pasivo, quien fue jefe policial en Guayaquil, mencionó que los “centros de entrenamiento para sicarios” están ubicados en la frontera norte (Esmeraldas), en la provincia de Los Ríos y en Guayaquil.

“Recuerdo que en La Prosperina (noroeste) reclutaban a menores de edad. En su inicio los obligan a robar y poco a poco llegaban a asesinar”, reveló Zapata. (AEB)