La reciente violación a una estudiante del colegio Luis Napoleón Dillon, de Quito,  conmociona e indigna al Ecuador y  trae a la memoria el caso de Paola Guzmán, una joven que en 2002 se quitó la vida -comiendo diablillos-, al enterarse de su embarazo tras dos años de sufrir abusos sexuales por parte del vicerrector de su colegio, en Guayaquil.

Después de 18 años y sin culpables, el caso de Paola llegó a la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CorteIDH) como el primero sobre violencia sexual en el contexto educativo. En su sentencia, emitida en junio de 2020, el organismo "encontró al Estado de Ecuador responsable por la violencia sexual sufrida por Guzmán" y se estipuló que los Estados de la región estén en la obligación de implementar algunas normas para erradicar este tipo de violencia.

A pesar de eso, siguen existiendo casos de violencia en establecimientos educativos. Según el Instituto Nacional de Estadísticas y Censo (INEC) entre 2014 y 2021, en Ecuador se han recibido 28.154 denuncias de delitos sexuales cometidos en el ámbito educativo por docentes, autoridades de instituciones educativas, choferes de transporte escolar y conserjes.  También se apunta que en el país, 19 de cada 100 mujeres, experimentaron algún tipo de violencia en el ámbito educativo;

Sin embargo, las demás cifras son aterradoras: Se registraron 12.163 casos de violencia sexual receptados a través del sistema educativo nacional; más de 8 mil por personas fuera del sistema educativo y casi 4 mil dentro del sistema educativo. 

MÁS CIFRAS SOBRE CASOS DE VIOLENCIA EN EL SISTEMA EDUCATIVO

Directora del colegio Dillon renunció

En esta última semana de abril ha habido varias manifestaciones en las que, especialmente estudiante, exigen justicia por la menor ultrajada y, además, rechazan el trato que esta habría recibido por parte de las autoridades de la institución, porque "la rectora y la vicerrectora llamaron a sus padres a decir que está borracha", 

"No la defendieron, no utilizaron los protocolos adecuados y permitieron que el violador esté libre", fueron algunos de los gritos que se escucharon durante la protesta de este 27 de abril de 2022.

Asimismo, la ministra de Educación, María Brown, informó que la tarde del 27 de abril aceptó la renuncia de la rectora del plantel, al no haber cumplido con los protocolos establecidos, tras conocerse la violación de la estudiante. Además, tiene abierto un proceso de evaluación e investigación.

Hasta el momento se desconoce el paradero del sospechoso de la violación.

OTROS CASOS

En la academia Pedro Traversari (Aampetra) de Quito, entre 2010 y 2011, 41 niños fueron violados y agredidos por su profesor. Además, en la capital dos casos más en el colegio La Condamine alarmaron al país.

Guayaquil no se queda atrás. En el gobierno del expresidente Rafael Correa, la Fiscalía reveló que unos 100 niños habría sufrido violación sexual por dos profesores y un inspector del colegio réplica Aguirre Abad.

¿Qué debe hacer Ecuador para erradicar estas conductas?

Acorde a lo que estipuló la Corte Interamericana de Derechos Humanos, el país debe garantizar que el derecho a la educación integral incluya el acceso a educación sexual y reproductiva adaptada para que las niñas y adolescentes entiendan de manera adecuada sus derechos sexuales y reproductivos y lo que implican las relaciones afectivas.

Además, se dejó en claro que Ecuador tiene la obligación de erradicar los estereotipos de género de ambientes educativos y sistemas judiciales, lo que origina la toma de medidas que promuevan el empoderamiento de las niñas e impugnen las normas y los estereotipos patriarcales” para prevenir o revertir todo tipo de discriminación.