La población de Baños de Agua Santa demostró una vez más su unidad en tiempos de emergencia. Sucedió la tarde del domingo 21 de octubre de 2018, cuando un incendio forestal puso en peligro a las especies protegidas del zoológico San Martín, ubicado en el barrio Pititig.

Un medio de comunicación local alertó sobre el siniestro, que empezó en el sector de la cascada Inés María y se extendió hasta las instalaciones del zoológico. Un grupo de personas de inmediato formó una cadena de ayuda y acudió al lugar.

Lorena Freire, de 22 años, fue una de ellas. Junto a su marido, Paulo, salió desde el centro de Baños, compró dos botellones con agua y se dirigió hasta el sitio.

A las 10:30 se habría registrado la emergencia, que logró ser controlada; sin embargo, a las 13:00 se propagó con fuerzas y hasta las 19:00 todavía no controlaban en su totalidad el fuego, que se extendía por la montaña de Pititig.

El propietario, Javier Vega, resaltó y agradeció la solidaridad de los baneños. Mencionó que el centro tiene 30 años y es la primera ocasión que ocurre una desgracia de esa magnitud.

Mencionó que tienen 300 animales y todos fueron evacuados. Los que tuvieron más inconvenientes fueron los osos que fueron sedados para sacarlos.

Añadió que pondrán la denuncia para que las autoridades investiguen y ubiquen a los posibles responsables del incendio, que se cree fue provocado.

El coordinador zonal tres y director del Ambiente en Tungurahua, Pablo Pazmiño, resaltó que el incendio fue provocado y agradeció a la población que se unió para ayudar a controlarlo. Aseguró que todas las vidas silvestres fueron rescatadas a tiempo y llevadas a un sitio de cuarentena.

Por su parte, el coronel Rommel Navarrete, jefe de la subzona de Tungurahua, expresó que alrededor de 100 policías atendieron el suceso. Además pidieron la colaboración de un helicóptero con dispositivo para ayudar a apagar el fuego.

También participaron 60 militares de la Brigada Blindada Galápagos, bomberos de los nueve cantones de Tungurahua y de Riobamba.

Asimismo, técnicos de la Secretaría de Gestión de Riesgos (SGR) y guardaparques del Parque Nacional Llanganates y del Ministerio del Ambiente.