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El aterrador relato de trabajadora de CNEL que fue testigo del violento asalto
En una supuesta confusión uno de ellos mató a su compinche. Los malandrines habrían portado dos tipos de armas
Cuatro minutos les tomó a siete delincuentes apoderarse de los 300.000 dólares que dos guardias habían retirado de la Corporación Nacional de Electricidad (CNEL EP) situada en la Garzota, en el norte de Guayaquil. Sin embargo, para Mariuxi (nombre protegido), empleada de esta institución, parecieron una eternidad.
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La joven, quien tiene casi cinco años laborando en esta empresa de distribución y comercialización de energía eléctrica, fue testigo del asalto cometido por sujetos que la mañana de este miércoles 13 de marzo llegaron a bordo de un vehículo Hyundai Creta, color concho de vino. Dos de los pillos ingresaron haciéndose pasar como clientes. Luego llegaron otros dos sujetos que sometieron a los celadores y les arrebataron el dinero, que era sacado en una funda negra.
“Estaba trabajando, de repente se oyó un sonido fuerte, pensé que se le había caído algo a algún cliente. Luego se escuchó una ráfaga de tiros y todos nos metimos debajo de las mesas. Había mucha bulla, gritos. Cuando se fueron los delincuentes me metí al baño. Fueron los minutos más tensos de mi vida, pensé que nos iban a matar a todos”, recordó aún asustada Mariuxi.
Una fuente policial de alto rango reveló que los malhechores aprovecharon el instante en que los guardias salían para arrebatarles la plata y que los celadores reaccionaron para tratar de evitar el robo, pero que fue un disparo de uno de los ladrones el que mató a uno de los suyos.
“El tiro salió del arma disparada por su compinche, quien también estaba herido. Creemos que por la reacción de los guardias hubo una confusión y se dispararon entre ellos. Se trató de un caso fortuito, es decir, un homicidio. Hay que resaltar que el fallecido llevaba una doble vestimenta”, explicó el jefe policial.
Los malandrines habrían portado dos tipos de armas: una pistola 9 milímetros y un revólver calibre 38. De acuerdo con las cámaras de seguridad, el delito se perpetró a las 11:42. Cuatro minutos después, los pillos ya se habían subido al carro que luego apareció abandonado en el mismo sector, a dos cuadras de la avenida Agustín Freire. Los asaltantes abordaron otros dos vehículos, uno de ellos un Chevrolet color plata.
En este evento también resultó herido uno de los guardias de seguridad que llegaron a recaudar el dinero. Este ya había realizado varios traslados de valores junto a sus compañeros, tanto en el norte del Puerto Principal como en el cantón Durán. (AEB)
Tenía antecedentes penales
El presunto pillo, quien recibió un tiro cerca de la mandíbula y cuyo cuerpo quedó por la puerta de ingreso de CNEL, fue identificado como Mario Miguel Altamirano Carvajal, de 32 años. Tenía cuatro procesos judiciales por robo (2011, 2013, 2018 y 2021) y uno por infiltración en zonas de seguridad (2017). Su cuerpo fue retirado ayer de la morgue.
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