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¿Ángel o demonio? Las consecuencias espirituales del dramático discurso de Wilman Terán

Discurso de Wilman Terán tiene un desenlace espiritual trágico. Expertos explican que el mensaje es un pecado que intentó conmover al público. 

“No olviden que el ángel de luz que fue enviado a la tierra para salvarnos fue confundido con el diablo”. Esta fue una de las tantas frases con carga religiosa que Wilman Terán dijo durante su intervención en la Asamblea Nacional, el 17 de julio.

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El expresidente del Consejo de la Judicatura acudió al palacio legislativo para continuar con el juicio político en su contra por los delitos de delincuencia organizada y obstrucción a la justicia.

Su defensa fue exageradamente dramática y emocional. En los momentos en los que hizo analogías con la religión se comparó con Jesucristo, usó el nombre de Dios para hacer referencias, adujo que vivió un vía crucis, se comparó con el mismísimo demonio y hasta maldijo a algunos: “Se atragantarán con el fruto de sus males”.

¿Cuáles son las consecuencias para Wilman Terán?

El teólogo Henry Cando explica que Terán intentó ‘seducir’ a sus oyentes mediante sus palabras y sus gestos. Según el experto, añadir el factor religioso es clave para persuadir, porque el Ecuador es un país que mira a este tema como una respuesta a la moral a lo correcto e incorrecto.

Cando señala que el exfuncionario pretendió conmover haciéndose pasar como un profeta:“Ser la ‘voz oficial’ de Dios aquí en la Tierra”. Sin embargo, para el teólogo, tomar el nombre del Todopoderoso en vano es una blasfemia. Un pecado grave.

El exfuncionario es procesado por delincuencia organizada y obstrucción a la justicia.archivo

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El maestro en reiki Diego Rovayo añade que esta falta se paga con una muerte dolorosa. Según su análisis, Terán “tiene una enfermedad espiritual”.

El experto lanzó unas cartas del tarot para interpretar el discurso del procesado y en estas solo pudo ver tragedia. El resultado indica que al exfuncionario le habrían prometido ‘algo’ para que callara y no diga ciertas cosas.

Rovayo añade que esta no será la última intervención de Terán y que es posible que en futuro aduzca que perdió la razón. “Quiere que le vean que está demente”.

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