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El famoso juego ha traído problemas a sus participantes en Australia.cortesía

Alertan por quemaduras graves en niños al imitar uno de los retos de El Juego del Calamar

Tres niños han sido tratados por quemaduras graves en Australia, solo en el último mes, por intentar hacer una de las galletas que son parte de uno de los desafíos

“El Juego del Calamar”, la exitosa serie de Netflix, sigue haciendo roncha, pues muchos de los retos que tiene que superar los participantes, basados en populares juegos infantiles surcoreanos se han convertido en tendencias virales en plataformas como TikTok e Instagram.

Una de esas tendencias es recrear el desafío ‘Dalgona Candy’ que alienta a las personas a hacer una galleta de miel y azúcar y tallar una forma en el dulce sin romperla.

Por inocente que parezca el juego, el desafío ha provocado una advertencia urgente de los cirujanos de quemaduras en el Children’s Hospital en Westmead (Australia).

Tres niños han sido tratados por quemaduras graves solo en el último mes por intentar hacer una de estas galletas, y otros servicios de quemaduras en Australia están viendo tendencias similares, informa la prensa de ese país.

El doctor Erik La Hei, director interino de la Unidad de Quemados, advirtió a los padres sobre el importante riesgo de quemaduras que representa la fabricación de las galletas de azúcar, e instó a padres y adolescentes por igual a permanecer más atentos para evitar lesiones.

“El azúcar se derrite a una temperatura superior a la necesaria para hervir el agua, por lo que la mezcla de toffee en forma de panal es más caliente y ‘pegajosa’. Si la mezcla se derrama o se manipula mientras aún está caliente, el mayor calor y el mayor tiempo de contacto provocan quemaduras más profundas y graves “, dijo.

“Es absolutamente vital que si ocurre un accidente como este, los padres y los adolescentes sepan los pasos correctos de primeros auxilios para tomar y ejecutar el área quemada bajo agua corriente fría durante al menos 20 minutos tan pronto como sea posible”, agregó.

Uno de los niños quemados fue identificado por los medios australianos como Aiden, de catorce años, quien sufrió quemaduras profundas en la mano y en la pierna mientras manipulaba la galleta caliente.

Si bien las quemaduras de Aiden se están curando bien, requerirá un tratamiento continuo y pasará el próximo año en un equilibrio de presión para garantizar que se produzca una curación adecuada.