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Farándula

El músico, desde niño, era fan de la música popular. Luchó mucho para convertirse en profesionalcortesía

El Chicherito: ¡Con la chicha no se metan!

Lenin Chávez quiere acabar con el mito de que “cualquier aparecido” es cantante popular. Él asegura que al género hay que tomarlo en serio. 

Desde que el cantante Lenin Chávez era un niño amaba la ‘chichita’. Jamás olvidará aquellos festivales de música en los que se ‘cuadraba’ cerca de la tarima a la espera de que le regalaran un póster o un disco de Gerardo Morán o María de los Ángeles.

Hoy, convertido en un músico profesional -luego de estudiar cinco años en el Conservatorio Nacional-, su única meta es evitar que la chicha siga siendo “la última rueda del coche” en el país.

El Chicherito, como todos lo conocen, busca que ese género sea tomado con seriedad y que no “cualquier aparecido se haga llamar cantante chichero”.

Chávez explica que el camino para que sus videos superen las 200 mil reproducciones y para ‘codearse’ con los máximos representantes de la música popular, fue arduo.

Aunque siempre tuvo la certeza de que compartiría escenario con los ‘duros’, cuando era un muchacho no tenía ni idea de cómo lograrlo.

“Toqué muchísimas puertas. Hasta me ofrecí a acompañar a los artistas en su cuerpo de baile”, revela. Sin embargo, en aquellos días, en los que él tenía unos 14 años, la respuesta era la misma: “No, eres muy chiquito”.

Así entendió que la única forma de alcanzar su sueño era estudiando. Además de profesionalizarse en la música, se convirtió en ingeniero en Marketing y Finanzas. Y por eso no solo maneja su carrera, sino también la de otros artistas.

Amor por su tierra

Para el Chicherito no existe nada más importante que proyectarse de forma adecuada en el escenario. Aunque su estilo es bastante juvenil, sobre las tarimas luce sus mejores galas. “Con mucho respeto, pero en mí nada de brillitos y lentejuelas, uno debe verse como hombre”, describe.

En su brazo derecho, el músico lleva tatuado el mapa y la bandera de Ecuador. “Me siento muy orgulloso de lo que soy”, menciona Chávez.

Actualmente, le están diseñando su nuevo tatuaje. Se trata del rostro de Rumiñahui, un valiente guerrero que para el Chicherito representa la resistencia inca.