Baños de Agua Santa, el encantador pueblo turístico en la provincia de Tungurahua, es escenario de una tragedia que ha oscurecido su habitual ambiente de alegría y aventura.

Las intensas lluvias, que azotaron la región el sábado 15 y domingo 16 de junio, culminaron en devastadores derrumbes que han dejado una estela de muerte y destrucción en la zona de El Placer de la parroquia Río Verde.

Hasta las 23:30 del domingo 16, Roberto Luque, ministro de Transporte y Obras Públicas, junto a Arturo Félix Wong, secretario general de la Administración; Jorge Carrillo, secretario de Gestión de Riesgos; el prefecto de Tungurahua, Manuel Caizabanda; Marlon Guevara, alcalde de Baños, entre otras autoridades, recorrieron parte de las zonas afectadas, entre ellas la represa Hidroeléctrica Agoyán, que desde el domingo quedó suspendida para reparaciones.

Hasta la noche del domingo, Luque confirmaba que la cifra de muertos llegaba a siete, 19 heridos y al menos 54 damnificados; de estos, 53 pernoctaron en hoteles del centro cantonal.

Mientras que Daysi Chicaiza, habitante de El Placer, aseguró que solo de la familia de su mamá son siete personas fallecidas y de su papá al menos cuatro. “Hay más vecinos que no aparecen”, lamentó la joven.

La carretera que une Baños con Puyo y el resto de la Amazonía estará cerrada al menos hasta el martes 18 de junio, mencionó el alcalde Marlon Guevara.

Roberto Luque confirmó que existen al menos 17 deslizamientos que bloquean los accesos. Esperan este lunes la ayuda de las maquinarias del MTOP y de las prefecturas y municipios de Tungurahua, Chimborazo y Cotopaxi.

Manuel Caizabanda, prefecto, informó que las fuertes lluvias han afectado las vías estatales y parroquiales en Tungurahua, pero la mayor afectación es la carretera Baños-Puyo. En Pelileo, tienen varias vías de parroquias con socavaciones y destrucción de la masa asfáltica.

Las clases también fueron suspendidas tanto virtuales como presenciales en este cantón de Tungurahua.

En medio del dolor, en Baños de Agua Santa demuestran que están unidos para nuevamente levantarse. José Luis Freire, servidor turístico de Baños, recalcó que por los meses de junio hasta agosto la lluvia siempre golpea con fuerza en el cantón y que en esta temporada enfrentan una emergencia muy dolorosa.

Freire mencionó que apenas conocieron de la desgracia en Río Verde, los propietarios de hoteles y alojamientos ofrecieron los hospedajes para los rescatistas y los damnificados.

“Baños vive del turismo y en equipo vamos a reactivarnos”, aseguró.

Esta fuerza de solidaridad también la demuestra Karen Pazmiño, exreina, quien está encargada de recolectar víveres, colchones y prendas de vestir para entregar a las familias que han perdido sus hogares.

Mientras un grupo de habitantes entregaba refrigerio a los conductores que esperaban en largas filas para poder llegar a sus destinos por la Amazonía la madrugada del lunes 17.

Jorge Carrillo Tutivén, de la Secretaría de Gestión de Riesgos, dijo que a medida que pasen las horas seguirán actualizando las cifras de las personas afectadas y víctimas mortales.

Hasta la noche del domingo 16, personal del Cuerpo de Bomberos de Baños, Ambato, Latacunga y Chimborazo, junto con personal del Grupo de Operaciones Especiales, están en las labores de recuperación de los cuerpos.

Hasta la madrugada del lunes 17 solo trasladaron a personas heridas a los hospitales de Baños y Ambato. Aún buscan en medio del fango a los desaparecidos.

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