La ministra de Energía y Minas (e), Inés Manzano, anunció la mañana de este jueves, 24 de octubre, que hasta el momento, se mantiene la reducción de los cortes de luz programados para las próximas dos semanas. Sin embargo, advirtió que esta situación podría modificarse dependiendo de las condiciones meteorológicas, las cuales están sujetas a cambios constantes.

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Manzano enfatizó que las previsiones del Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (INAMHI) son variables, lo que hace necesario un monitoreo constante de la situación. "No puedo descartar algo así porque sería una irresponsable", afirmó la ministra durante una entrevista con el medio digital Primera Plana, refiriéndose a la posibilidad de ajustar los cronogramas de racionamiento de energía.

"Las previsiones climáticas se trabajan con Perú y Colombia. Según los informes, en estos días entraba la humedad a la región y en base a eso levantamos los cronogramas. Hacemos todo lo posible para cumplir con la programación de ocho horas en esta semana y seis en la próxima", indicó.

El Gobierno había comunicado previamente que los cortes de luz para la próxima semana (28 de octubre al 3 de noviembre) serían de 6 horas y de 4 horas para la semana siguiente (4 de noviembre al 10 de noviembre). La ministra reiteró que constantemente están evaluando la situación. 

A pesar de que el Gobierno ha intentado proporcionar mayor certidumbre al anunciar los horarios de los cortes de luz y su reducción gradual en las próximas semanas, persisten dudas sobre el cumplimiento de esos cronogramas. La razón es que los embalses de las hidroeléctricas continúan en una situación crítica y la incorporación de nueva energía térmica aún debe esperar.

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Hasta las 14:00 de este 22 de octubre de 2024, el nivel del embalse de Mazar (provincia de Azuay)se mantenía en 2.113,83 metros sobre el nivel del mar (msnm). El pasado domingo 20 de octubre de 2024, antes de que rija el nuevo cronograma, con una reducción de ocho horas diarias de cortes, el embalse se ubicaba en 2.115,25 msnm, es decir, en dos días tuvo una caída de 1,42 metros.

El nivel de agua en el embalse de Mazar es el más crítico para el sector eléctrico, ya que alimenta a tres hidroeléctricas: Mazar, Paute-Molino y Sopladora. El Operador Nacional de Electricidad (Cenace) ha señalado que el nivel mínimo de agua necesario para su operación es de 2.110 msnm. Si las hidroeléctricas continúan funcionando con esa cantidad de agua, podrían sufrir daños, ya que los sedimentos podrían afectar los motores de las centrales.

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