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La vestimenta de Lola es un híbrido de algunas provincias del Ecuador.RENE FRAGA

La Lola es la influencer indígena más picarona de TikTok

La Lola es un personaje que tiene como particularidad ser pícara y chistosa. Su contenido es cómico y su historia viene del teatro de la calle

Por Byron Castillo

11 de noviembre, 2024

A Sonia Flores, mejor conocida por su personaje La Lola, se le hizo fácil dar el brinco del teatro callejero a las redes sociales.

Es una creadora de contenido muy particular, que se considera una influencer con picardía y gracia. Afirma que es coqueta, pero no vulgar, y eso se refleja en sus videos en redes sociales, donde siempre lanza un piropo a algún caballero que le parece atractivo.

No se insinúa ni insulta; todo lo hace con doble sentido y bromas picantes.

Su contenido está basado en historias cotidianas con trama y humor, lo que le ha permitido trabajar junto a otros tiktokers reconocidos, como El Longazo y El Colágeno. El primero actúa como su hijo y el segundo como su pareja, un poco ‘mandarina’. Juntos protagonizan una serie de situaciones graciosas y divertidas.

Fue actriz de teatro callejero por más de 25 años.cortesía

La Lola tiene un equipo de trabajo exclusivo para ella que produce sus videos, y en poco tiempo ha logrado acumular casi 200 mil seguidores en TikTok y aproximadamente 1 millón y medio de ‘me gusta’ en sus producciones.

¿Cómo pasó de la calle al TikTok?

Esta carismática mujer afirma que se diferencia de otras creadoras de contenido porque no llama la atención bailando ni generando controversia, sino a través de la comedia.

Su vestimenta es un híbrido de varias ciudades: la falda es cuencana, las medias y la chalina de Cotopaxi, y el resto de las prendas las combina según el lugar al que asista.

Una de sus particularidades es pintarse el rostro de blanco, un rasgo que heredó de su vida en las calles, cuando era artista popular. Explica que así se maquillan los actores callejeros para que sus expresiones faciales sean visibles para los espectadores distantes.

La mayor parte de su vida se dedicó a hacer reír a los transeúntes en la Plaza Grande, en el Centro Histórico, o en el Parque La Carolina.

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Su carrera artística comenzó como zanquera, luego en un grupo de danza, y terminó haciendo teatro popular por más de 25 años. Sin embargo, La Lola reconoce que su faceta de influencer le ha dado más gratificaciones personales y recompensas económicas.