Con el hallazgo de la cabeza se completó, ayer, la sepultura de César Santiago Loyola Bajaña, de 21 años, quien fue decapitado y abandonado en el recinto Gran Colombia, de la parroquia Lorenzo de Garaicoa, del cantón Simón Bolívar, Guayas.

En la citada jurisdicción, cerca del sector Poza de Pato, localizaron la cabeza de Loyola envuelta en una funda plástica dentro de una maleta.

El procedimiento se hizo cerca de las 15:00 del lunes, tres horas después que enterraron el cuerpo.

En el trayecto al cementerio, Fernanda Bajaña, madre del difunto, abrazó el cofre mortuorio donde reposaban los restos de su hijo. Después del sepelio, debió reconocer la cabeza y hacer el trámite para unir la parte.

La mujer declaró que su hijo desapareció en Babahoyo, Los Ríos, el 4 de enero. Ese día le avisaron que lo habían embarcado en un carro blanco.

Ella alegó desconocer los motivos del secuestro de Santiago, pero confirmó que hace más de un mes también se lo llevaron por cinco horas y a su retorno, él prefirió no contarle nada. 

¿Quieres acceder a todo el contenido de calidad sin límites? ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!