Poco se conoce de la condición de salud de las 61 personas que están dentro del Centro de Privación de Libertad de Turi y que desde el lunes no pueden regresar a sus hogares.

Son 49 guías penitenciarios y 12 cocineros los que se encuentran dentro de la prisión en áreas diferentes.

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Las familias del personal del área de cocina se reunieron en los exteriores de la cárcel, este miércoles, para exigir que se les permita salir de ese lugar y puedan regresar con sus familias.

Las autoridades no se han pronunciado sobre las estrategias que usarán para su salida.

En tanto, la Cruz Roja de Azuay brindó atención médica en el interior de la prisión.

Cristian Astudillo, presidente de la junta provincial del Azuay, detalló que ofrecieron 21 atenciones médicas y que una mujer tuvo que ser trasladada a una casa de salud por complicaciones.

La atenciones se dieron tanto a privados de la libertad como a los guías penitenciarios y personal de cocina.

La mujer trasladada es una de las trabajadoras externas que prepara los alimentos en el centro carcelario y que desde las 05:00 del lunes 8 de enero no ha podido regresar a su hogar.

La mujer fue llevada al Hospital Materno Infantil del IESS. Se desconoce el estado de salud de la mujer.

Astudillo señaló que la atención médica que brindaron fue luego de un proceso de coordinación y acuerdos tanto con las autoridades como con los privados de libertad.

El ingreso fue únicamente de personal de atención médica de la Cruz Roja.

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