Una mujer que no paraba de llorar golpeaba con gran fuerza las puertas del vehículo de Medicina Legal en donde estaba el cuerpo de su hijo asesinado. “Levántate, mi corazón, tú no puedes estar allí”, gritaba la señora, mientras otro hombre, junto a dos agentes policiales trataban de calmarla.

“Ya son dos hijos que le matan este año”, murmuraron entre los curiosos que vieron el levantamiento del cuerpo la mañana de este viernes 2 de diciembre, en Anconcito, provincia de Santa Elena.

La dolida mujer no encontraba consuelo al confirmar que uno de los asesinados en el área del basurero de Anconcito era su hijo José Antonio Tomalá Torres, de 21 años.

El cadáver estaba maniatado y su boca había sido cubierta con una tela, tenía huellas de haber sido golpeado. Sus victimarios le ‘pegaron’ dos ‘pepazos’ en el cráneo y uno en la espalda. El cuerpo yacía boca abajo.

A cuatro metros de donde estaba Tomalá Torres estaba sin vida su amigo William Rafael Román Borbor, de 24 años, quien tenía dos tiros, uno en la cabeza y otro cerca del pecho.

El hallazgo lo hicieron recicladores a tres kilómetros de la vía principal, en donde en anteriores ocasiones han encontrado otros cadáveres.

“Por la rigidez de los cuerpos estimamos que el crimen habría ocurrido a eso de la medianoche”, informó el coronel de policía Franklin Yacelga, jefe del comando provincial.

Con la muerte de Tomalá Torres y Román Borbor ya suman doce las personas asesinadas en lo que va de este año en el puerto de Anconcito.

La matanza en este puerto pesquero peninsular empezó el 18 de abril cuando fue acribillado Luis Alfredo Tomalá Torres, de 38 años, conocido como Volcán, hermano de José Antonio, uno de los hallados  asesinados este viernes 2 de diciembre de 2022.

La situación se ha vuelto tan compleja porque esta es la cuarta ocasión que en esta población ocurren dobles asesinatos. (JL)